MANERAS DE VIVIR
Octava temporada, capítulo 176
Fecha de emisión: 5 de agosto del 2019
APARTAMENTO DE CARLOS / COCINA / MAÑANA
Carlos se toma un café mientras mira su teléfono, cuando suena el timbre. El joven, extrañado, camina hacia la puerta, y se sorprende cuando, al abrirla, se encuentra a Andrea al otro lado, con una bolsa entre sus manos.
Andrea: Buenos días.
Carlos: ¿Qué haces aquí? ¿Habíamos quedado?
Andrea: No. No habíamos quedado, pero había pensado que podríamos desayunar juntos. He traído churros.
Carlos: La verdad es que tengo prisa.
Andrea: (Extrañada) ¿Y eso?
Carlos: Tengo… tengo cosas que hacer.
Andrea: Ya.
Un tenso silencio surge entre ambos.
Andrea: Bueno, pues… me voy. No quiero entretenerte.
Carlos: Hablamos, ¿vale?
Andrea: Claro.
La joven parece que va a decir algo más, pero Carlos cierra la puerta, ante la impotente mirada de su exnovia.
APARTAMENTO DE HUGO Y ÓSCAR / SALÓN / MAÑANA
Hugo abre la puerta del apartamento, sorprendiéndose al encontrarse con Óscar al otro lado. El joven parece serio.
Hugo: ¿Qué haces aquí?
Óscar: Creo que deberíamos hablar, ¿no?
Hugo: No.
Hugo intenta cerrar la puerta, pero el chico se lo impide con el pie.
Óscar: Por favor, Hugo.
Tras unos segundos en silencio, el joven suspira.
Hugo: ¿Qué quieres?
Óscar: Decirte que te quiero.
Hugo: Pues ya lo has hecho.
Óscar: Hugo…
Hugo: (Interrumpiéndole) ¿Por qué no me lo contaste?
Óscar: Porque sabía que te ibas a poner así.
Hugo: Lo más triste de todo es que no me conoces en absoluto.
Óscar: (Extrañado) ¿A qué te refieres?
Hugo: A que a mí me gusta que vengan con la verdad por delante, Óscar.
Al joven se le llenan los ojos de lágrimas.
Óscar: Lo siento.
Tras unos segundos en silencio, Hugo suspira.
Hugo: Anda, ve a recoger tus cosas, y vuelve.
Óscar: (Sorprendido) ¿En serio?
Hugo: Esta también es tu casa. Pero… necesito tiempo.
Óscar: Claro. Claro, no te preocupes… estaré aquí en una hora.
Hugo: Bien.
Los dos se miran, en silencio.
Óscar: ¿Puedo…?
Hugo: (Interrumpiéndole) Tiempo.
El joven fuerza una sonrisa, intentando ocultar su decepción.
Óscar: Luego nos vemos.
Hugo: Hasta luego.
Óscar se aleja de allí mientras Hugo cierra la puerta, pensativo.
BAR “FOUR” / EXTERIOR / MAÑANA
Claudia coloca las mesas en la terraza, cuando Vero se acerca a la joven, con una enorme sonrisa dibujada en su rostro.
Vero: ¡Buenos días!
Claudia: (Molesta) ¿Qué coño haces aquí otra vez?
Vero: Vengo a tomarme un café.
Claudia: ¿Cuántas veces tengo que decirte que aquí no eres bienvenida?
Vero: ¿Todavía estás con eso?
Claudia: ¿Te parece raro?
Vero: Me parece infantil.
Claudia: Tiene gracia que seas tú la que hables de cosas infantiles.
Tras unos segundos en silencio, Vero suspira.
Vero: Me voy a tomar el café.
Claudia: No vas a entrar.
Vero coge aire, intentando mantener la calma.
Vero: ¿Sabes quién estuvo aquí cuando dejaste tirado tu negocio, y a tu marido?
Claudia: Nadie te lo pidió.
Vero: Esto se habría ido a la mierda.
Claudia: No te creas tan imprescindible.
Vero: Pregúntaselo a cualquiera.
Ahora es Claudia la que intenta mantener la calma.
Claudia: No quiero volver a verte por aquí cerca, Vero. Y no te lo voy a volver a repetir.
Claudia entra en el local, mientras Vero esboza una cínica sonrisa.
BAR “FOUR” / INTERIOR / MAÑANA
Suena “Mi reino”, de Luís Cepeda.
Carlos: ¿Crees que he hecho bien?
Desde el otro lado de la barra, Jaime mira a su amigo, preocupado.
Jaime: No, Carlos. Pero es que creo que no lo has hecho bien desde el principio.
Carlos: (Extrañado) ¿A qué te refieres?
Jaime: Sabías perfectamente que esto iba a pasar y, aún así, le has estado dando esperanzas.
Carlos: Yo no podía saber que…
Jaime: (Interrumpiéndole) Carlos, por favor.
Tras unos segundos en silencio, el joven suspira.
Carlos: ¿Y qué hago ahora?
Jaime: Habla con ella.
Carlos: No se lo va a tomar bien.
Jaime: Lo tendrá que aceptar.
Carlos: Sí, pero…
Jaime: (Interrumpiéndole) Pero nada, Carlos. Tienes que hablar con ella, sí o sí.
Carlos mira a su amigo, sin saber qué decir.
APARTAMENTO DE HUGO Y ÓSCAR / DORMITORIO / MAÑANA
Óscar termina de deshacer su maleta cuando Hugo entra en el dormitorio, con una forzada sonrisa dibujada en su rostro.
Hugo: ¿Cómo vas?
Óscar: (Sonríe) Bien. Terminando.
Hugo: ¿Necesitas algo?
Óscar: No. Todo bien.
Hugo: Vale.
Los dos guardan silencio durante unos segundos.
Óscar: ¿Te apetece que salgamos a comer por ahí?
Hugo: La verdad es que no tengo muchas ganas.
Óscar: Venga. Lo pasaremos bien.
Tras unos segundos en silencio, Hugo coge aire.
Hugo: No insistas, por favor. No me apetece.
Óscar: Hugo…
Hugo: (Interrumpiéndole) Ya te lo he dicho. Necesito tiempo.
Óscar: Ya. Claro. Perdona.
De nuevo silencio.
Hugo: Me voy a dar una vuelta.
Óscar: ¿Quieres que te acompañe?
Hugo: No. Prefiero ir solo.
Óscar intenta ocultar su decepción forzando una sonrisa.
Óscar: Claro.
Hugo: Luego nos vemos.
Óscar: Chao.
Hugo sale del dormitorio, ante la triste mirada de su novio.
BAR “FOUR” / INTERIOR / TARDE
Suena “Arde”, de Aitana.
Tras la barra del bar, Claudia se toma un café, pensativa, cuando Jaime entra en el local, visiblemente agobiado.
Jaime: Perdona el retraso. Me he sentado un rato en el sofá, y me he quedado un poco traspuesto.
Claudia: (Molesta) Ah, muy bien. Tú durmiendo, y yo aquí.
Jaime: Lo siento.
Los dos guardan silencio, y Jaime entra tras la barra.
Claudia: Tenemos que hablar.
Jaime: (Extrañado) ¿Qué pasa?
Claudia: Vero ha vuelto esta mañana.
Jaime: (Sorprendido) ¿Otra vez?
Claudia: Sí, otra vez.
Jaime: ¿Y qué ha pasado?
Claudia: Se ha puesto chula diciéndome lo mucho que te ayudó cuando yo me fui.
Jaime: Bueno, ahí tiene algo de razón.
Claudia: (Sorprendida) ¿Lo dices en serio? ¿Te vas a poner de su lado?
Jaime: Sabes que no.
Claudia: No lo parece.
Jaime: Mira, no quiero discutir. Si te ha molestado, lo siento.
Claudia: Ya.
De nuevo silencio.
Jaime: ¿En qué estás pensando?
Claudia: Voy a acabar con ella, Jaime.
Jaime: Es peligrosa.
Claudia: No le tengo miedo.
Jaime mira a su exmujer, preocupado.
APARTAMENTO DE CARLOS / SALÓN / TARDE
Sentado en el sofá, Carlos mira el móvil, nervioso, cuando suena el timbre. Suspirando, el joven se levanta y camina hacia la puerta. Al abrirla, se encuentra con Andrea.
Andrea: Hola.
Carlos: Gracias por venir.
Andrea entra en el apartamento, y Carlos cierra la puerta.
Andrea: Tengo que reconocer que me ha sorprendido tu llamada. Sobre todo, teniendo en cuenta lo de esta mañana.
El joven se pone nervioso, aunque intenta disimularlo.
Carlos: Ya… ¿quieres tomar algo?
Andrea: Preferiría que fueras al grano.
Carlos: Vale.
Carlos coge aire antes de volver a hablar.
Carlos: Lo siento.
Andrea: (Extrañada) ¿El qué?
Carlos: Te he estado engañado durante todo este tiempo.
Andrea: ¿De qué estás hablando, Carlos?
Carlos: No lo he hecho intencionadamente, de verdad. Quería decirme que podría perdonarte, que podríamos pasar página… cuando en el fondo, sabía que no podría hacerlo nunca.
Andrea: (Atónita) ¿Estás hablando en serio?
Carlos: No voy a poder confiar en ti de nuevo. Y créeme cuando te digo que lo siento, porque… porque te quiero. Pero eso no siempre lo es todo.
Andrea: Ya.
Un tenso silencio surge entre ambos.
Andrea: Creo que será mejor que me vaya.
Carlos: No te vayas así.
Andrea: ¿Para qué voy a quedarme, Carlos?
El joven mira a su exnovia, sin saber qué decir.
Andrea: Nos vemos.
Andrea sale del apartamento, cerrando la puerta tras ella, mientras Carlos se sienta en el sofá, con los ojos llenos de lágrimas.
CALLES DE GIJÓN / TARDE
Óscar camina por las calles de la ciudad, hacia su estudio, cuando, al girar una esquina, se topa con Lucas.
Lucas: Hola.
Óscar: Adiós.
Óscar intenta marcharse, pero Lucas se lo impide, cogiéndole del brazo.
Lucas: ¿Qué pasa?
Óscar: No me hagas hablar.
Lucas: Óscar…
Óscar: (Interrumpiéndole) No quiero decir nada de lo que luego vaya a arrepentirme.
Lucas: (Extrañado) ¿Arrepentirte por qué?
Óscar coge aire, intentando mantener la calma, y se suelta del brazo del joven.
Óscar: Vete a la mierda, Lucas.
Lucas: Pero…
Óscar: (Interrumpiéndole) No vuelvas a acercarte a mí en tu puta vida.
El chico se aleja de allí, ante la atónita mirada de Lucas.
APARTAMENTO DE VERO / SALÓN / TARDE
Vero abre la puerta de su apartamento, sorprendiéndose al encontrarse con Claudia al otro lado. Esboza una cínica sonrisa.
Vero: Tengo que reconocer que esta visita no la esperaba.
Claudia: Se acabó, Vero.
Vero: (Extrañada) ¿El qué?
Claudia: Todo este juego.
La joven deja escapar una sonora carcajada.
Vero: No, Claudia, no. Te equivocas. Esto acaba de empezar.
Claudia: Lo sé todo.
Vero: ¿Qué sabes?
Claudia: Tu pasado.
Vero se pone nerviosa, aunque intenta disimularlo.
Vero: No sé de lo que estás hablando.
Claudia: Claro que lo sabes.
Vero: Esta conversación se ha acabado.
Claudia: No, no vas a ser tú quién decide cuándo acaban las conversaciones. Ya no.
La joven coge aire, intentando mantener la calma.
Vero: ¿Qué quieres, Claudia?
Claudia: Que te mantengas alejada de nosotros si no quieres que todo salga a la luz.
Vero: No te tengo miedo.
Claudia: Pues deberías.
Claudia se aleja de allí mientras Vero, tras unos segundos en silencio, cierra la puerta, enfadada.
PLAYA DE GIJÓN / TARDE
Comienza a anochecer. Marta y Andrea pasean por la playa, dejando que el mar moje sus pies desnudos. Ambas parecen preocupadas.
Andrea: ¿Y sabes qué es lo que más me jode de todo? Que, en el fondo, yo también lo sabía.
Marta: No le des más vueltas, Andrea. Has luchado por lo que querías. A veces, las cosas no salen como nos gustaría.
Andrea: Ya.
Las dos guardan silencio durante unos segundos.
Andrea: Bueno, cosas peores me han pasado, ¿no?
Marta: (Sonríe) Esa es la actitud.
De nuevo silencio.
Andrea: ¿Y tú qué?
Marta: (Extrañada) ¿De qué?
Andrea: Que cómo estás.
Marta fuerza una sonrisa.
Marta: Bien. Bien, como siempre.
Andrea: No tienes buena cara.
Marta: Bueno, ya descubrirás lo que es tener una hija pequeña.
Andrea: ¿Solo es eso?
Marta: Sí. Sí.
Silencio.
Andrea: Ya sabes que, si necesitas hablar o cualquier otra cosa, estoy aquí.
Marta: Gracias.
Andrea: Es lo mínimo. Si no fuera por Hugo y por ti…
Marta: (Interrumpiéndola) No digas chorradas.
Andrea: Es la verdad.
Tras unos segundos en silencio, Marta fuerza una sonrisa.
Marta: Anda, ven aquí…
Las dos amigas se abrazan.
APARTAMENTO DE HUGO Y ÓSCAR / SALÓN / NOCHE
Hugo y Óscar permanecen sentados en el sofá, viendo una película. Hay un tenso silencio entre ellos. Finalmente, Óscar se levanta, suspirando.
Óscar: Me voy a la cama.
Hugo: Vale.
Óscar: ¿Tú no vienes?
Hugo: Quiero ver cómo termina la película.
Óscar: (Extrañado) Pero si la has visto mil veces.
Hugo: Y quiero volver a verla una vez más.
Óscar: Ya.
Los dos guardan silencio durante unos segundos.
Óscar: No vas a dormir conmigo, ¿verdad?
Hugo: (Suspira) No creo.
Óscar: ¿Para eso me has pedido que vuelva?
Hugo: Ya te he dicho que necesito tiempo.
Óscar: Y yo te lo voy a dar. Pero ¿dónde vas a dormir? ¿En el sofá?
Hugo: ¿Cuál es el problema?
Óscar: ¿Me lo estás diciendo en serio?
Hugo coge aire, intentando mantener la calma.
Hugo: ¿Qué esperabas, Óscar?
Óscar: Pues no lo sé, pero desde luego, esto no.
Hugo: Te lo vuelvo a repetir. Necesito tiempo.
Óscar: ¿Y estás seguro de que solo necesitas tiempo?
Hugo: (Extrañado) ¿Qué quieres decir?
Óscar: Que me da la impresión de que no vas a perdonarme nunca.
Hugo: Óscar…
Óscar: (Interrumpiéndole) Si es así, necesito saberlo.
Tras unos segundos en silencio, Hugo suspira.
Hugo: No lo sé, Óscar. No puedo engañarte.
Óscar: Ya.
Un tenso silencio surge entre ambos.
Óscar: Me voy a la cama.
Hugo: Hasta mañana.
Óscar sale del salón, ante la triste mirada de su novio.
APARTAMENTO DE IVÁN / SALÓN / NOCHE
Iván abre la puerta del apartamento, sorprendiéndose al encontrarse con una nerviosa Vero al otro lado.
Iván: ¡Vero! ¿Qué haces aquí?
Vero: ¿Estás solo?
Iván: Sí.
La joven entra en el apartamento ante la sorpresa de Iván, que cierra la puerta, irónico.
Iván: Como si estuvieras en tu casa.
Vero: Déjate de chorradas.
Iván: (Extrañado) ¿Qué coño te pasa?
Vero: Claudia lo sabe.
Iván: ¿Qué sabe?
Vero: Todo.
Iván: No te sigo.
Vero coge aire, intentando mantener la calma.
Vero: De verdad, sabía que eras estúpido, pero no tanto.
Iván: (Enfadado) Oye, no te pases.
Vero: Mi pasado, Iván. ¡Mi pasado!
Iván: (Atónito) ¿Qué? ¿Cómo se ha enterado?
Vero: Eso es lo que menos me importa ahora mismo, créeme.
Los dos jóvenes guardan silencio durante unos segundos.
Iván: ¿Qué vas a hacer?
Vero: Tengo que salir de aquí. Tengo que irme de Gijón.
Iván: (Sorprendido) ¿Qué?
Vero: Si lo cuenta, estoy acabada, Iván. Completamente acabada.
Iván mira a la joven, sin saber qué decir.
CONTINUARÁ…