MANERAS DE VIVIR

 

Octava temporada, capítulo 167

 

Fecha de emisión: 25 de febrero del 2018

 

CÁRCEL DE GIJÓN / CELDA DE CARLOS Y RUBEN / MAÑANA

 

Rubén se levanta de la cama, sonriente, y se acerca a la de Carlos. Éste le mira, aterrorizado, y el joven se ríe.

 

Rubén: Buenos días, Carlitos.

 

Carlos: Estoy cansado.

 

Rubén: ¿Crees que me importa?

 

Carlos: Rubén…

 

Rubén: (Interrumpiéndole) Desnúdate.

 

Tras unos segundos en silencio, Carlos suspira y empieza a desnudarse, mientras Rubén no borra la sonrisa de su cara.

 

PISO DE MARTA / SALÓN / MAÑANA

 

Marta desembala cajas en el piso que acaba de alquilar, cuando suena el timbre. Extrañada, camina hasta la puerta y se sorprende cuando, al otro lado, se encuentra con Iván.

 

Marta: ¿Qué haces aquí?

 

Iván: Tenemos que hablar.

 

Marta: Tú y yo ya no tenemos nada de lo que hablar.

 

Iván: Yo creo que sí.

 

Marta coge aire, intentando mantener la calma.

 

Marta: Márchate, Iván.

 

Iván: Marta…

 

Marta: (Interrumpiéndole) ¿Cómo has sabido dónde vivo?

 

Iván: ¿Qué más da eso ahora?

 

Marta: Desde luego que importa, porque no quiero volver a verte en mi vida.

 

Iván: No estás siendo justa.

 

La chica deja escapar una sonora carcajada.

 

Marta: No me hables de justicia.

 

Iván: Por favor…

 

Marta: (Interrumpiéndole) Hasta nunca, Iván.

 

Marta cierra la puerta, ante la impotente mirada del joven.

 

 

Iván: ¡Mierda!

CON

APARTAMENTO DE CLAUDIA / SALÓN / MAÑANA

 

Claudia: ¿Estás hablando en serio?

 

Sergio, sentado junto a la joven en el sofá, suspira.

 

Sergio: Completamente.

 

Claudia: Pero… es una locura.

 

Sergio: Tengo que irme de la ciudad. Y creo que no hay mejor persona que tú para tener esas acciones.

 

Claudia hace una pausa antes de volver de hablar.

 

Claudia: ¿Se lo has dicho a Jaime?

 

Sergio: No.

 

Claudia: Mejor. Prefiero ser yo la que hable con él.

 

Sergio: Entonces… ¿eso quiere decir que vas a comprar mis acciones?

 

Claudia: (Sonríe) Sí. Las compraré.

 

El joven devuelve la sonrisa a su amiga.

 

Sergio: Gracias. De verdad.

 

CÁRCEL DE GIJÓN / SALA DE VISITAS / MAÑANA

 

Hugo, nervioso, espera sentado en una de las mesas, cuando la puerta se abre y entra Carlos, serio. Al ver a su amigo, esboza una triste sonrisa y se acerca a él.

 

Carlos: Hola.

 

Hugo: Carlos…

 

El joven se sienta frente a su amigo.

 

Hugo: ¿Qué te pasa?

 

Carlos: Nada. ¿Por qué?

 

Hugo: Tienes una cara fatal.

 

Carlos: Vaya. Gracias.

 

Hugo: Te lo digo en serio.

 

Carlos coge aire antes de volver a hablar.

 

Carlos: No es nada, Hugo. De verdad.

 

Hugo: Carlos…

 

Carlos: (Interrumpiéndole) Si has venido para darme la chapa, será mejor que te vayas.

 

Hugo: Lo siento.

 

Los dos guardan silencio durante unos segundos.

 

Hugo: Hay que sacarte de aquí.

 

Carlos: Eso es imposible.

 

Hugo: Es difícil, pero no imposible.

 

Carlos: ¿En qué estás pensando?

 

Hugo: Todavía en nada… pero déjamelo a mí.

 

Carlos mira a su amigo, sin saber qué decir.

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / MAÑANA

 

Suena “Nueva York”, de Vega.

 

Marta permanece sentada en el sofá del local, tomándose un café, cuando entra Isra y, al ver a su amiga, se acerca a ella, sonriente.

 

Isra: Buenos días.

 

La joven fuerza una sonrisa.

 

Marta: Hola.

 

Isra se sienta junto a su amiga.

 

Isra: ¿Cómo estás?

 

Marta: Bueno… no recordaba que las mudanzas fueran tan agotadoras.

 

El pelirrojo deja escapar una sonora carcajada.

 

Isra: Poco a poco. Si necesitas ayuda, ya sabes.

 

Marta: Gracias.

 

Los dos jóvenes guardan silencio durante unos segundos.

 

Isra: ¿Y cómo llevas lo de Iván?

 

Marta: Bien.

 

Isra: ¿Segura?

 

Marta: Sí.

 

Isra está a punto de hablar, pero en ese momento Marta se levanta.

 

Marta: Tengo que irme. Nos vemos.

 

Isra: Chao…

 

La joven se aleja de allí, ante la preocupada mirada de su amigo.

 

CALLES DE GIJÓN / TARDE

 

Claudia y Jaime pasean por las calles de la ciudad. La joven se fuma un cigarro, y hay un tenso silencio entre ellos.

 

Jaime: Tengo que reconocer que me ha sorprendido tu llamada.

 

Claudia: Imagino.

 

De nuevo silencio.

 

Jaime: ¿Qué pasa, Claudia?

 

Claudia: He estado hablando esta mañana con Sergio.

 

Jaime: ¿Y?

 

Claudia: Deja la ciudad.

 

Jaime: (Atónito) ¿Cómo dices?

 

Claudia coge aire antes de volver a hablar.

 

Claudia: Voy a comprar sus acciones del “Four”.

 

Jaime mira a su ex mujer, sin poderse creer lo que está escuchando.

 

Jaime: Tiene que ser una broma.

 

Claudia: Te aseguro que no lo es.

 

Silencio.

 

Jaime: ¿Por qué no me lo ha dicho él?

 

Claudia: Le pedí ser yo misma la que te lo contara.

 

Jaime: Ya.

 

Un tenso silencio surge entre ambos.

 

Claudia: Espero que sepamos trabajar juntos sin malos rollos.

 

Jaime mira a la joven, sin saber qué decir.

 

CASA DE HUGO Y ÓSCAR / SALÓN / TARDE

 

Hugo permanece sentado en el sofá, tomándose un botellín de cerveza, cuando Óscar llega a casa, visiblemente cansado.

 

Óscar: Buenas.

 

El joven fuerza una sonrisa, mientras Óscar se sienta a su lado.

 

Hugo: Hola.

 

Óscar: Estoy agotado.

 

Hugo: ¿Día duro?

 

Óscar: Horrible.

 

Hugo: Ya.

 

Ambos guardan silencio durante unos segundos.

 

Óscar: ¿Y a ti qué te pasa?

 

Hugo: ¿A mí? Nada.

 

Óscar: Venga, Hugo.

 

Hugo guarda silencio durante unos segundos, pensando, hasta que finalmente suspira.

 

Hugo: He estado visitando a Carlos.

 

Óscar: ¿Y cómo está?

 

Hugo: Mal.

 

Óscar: Bueno… es normal.

 

Hugo: Ya.

 

De nuevo silencio.

 

Hugo: He ido a hablar con Ana.

 

Óscar: (Extrañado) ¿Con Ana?

 

Hugo: La viuda de Félix.

 

Óscar: (Atónito) ¡¿Cómo dices?!

 

Hugo: Tenía que hacerlo.

 

Óscar: ¿Para qué?

 

Hugo: Porque ella sabe toda la verdad. Y es la única que puede sacar a Carlos de allí.

 

Óscar: ¿Y has conseguido algo?

 

Hugo: Al menos, espero que hacerla pensar.

 

Óscar coge la mano de su novio.

 

Óscar: Todo irá bien. Ya lo verás.

 

Hugo: Eso espero.

 

El joven mira a su novio, con una triste sonrisa dibujada en su rostro.

 

PISO DE MARTA / SALÓN / TARDE

 

Marta e Isra permanecen sentados en el sofá del apartamento de la joven, tomándose un botellín de cerveza cada uno, en silencio.

 

Marta: Gracias por venir.

 

Isra: ¿Cómo no iba a hacerlo?

 

Los dos vuelven a guardar silencio.

 

Marta: Tenías razón. No llevo bien lo de Iván.

 

Isra: Ya.

 

De nuevo silencio.

 

Isra: Es normal. Fue bastante hijo de puta.

 

Marta: Sí. Pero no puedo evitar el seguir queriéndole.

 

Isra: Marta…

 

Marta: (Interrumpiéndole) Lo sé. Es absurdo.

 

Isra: No es absurdo. Es normal.

 

Marta: Supongo…

 

Isra, comprensivo, abraza a su amiga.

 

Isra: Tú te mereces algo mejor, Marta.

 

Marta: (Irónica) Sí, claro.

 

Isra: Te lo digo en serio.

 

Marta: Ya.

 

Los dos guardan silencio durante unos segundos, hasta que Isra besa a su amiga. Ésta se aparta rápidamente.

 

Marta: ¿Qué haces?

 

Isra: Perdona. Yo no…

 

Marta: (Interrumpiéndole) Creo que será mejor que te vayas.

 

Isra: Marta…

 

Marta: (Interrumpiéndole) Vete.

 

Tras unos segundos en silencio, el pelirrojo se levanta.

 

Isra: Lo siento. De verdad.

 

Isra sale del piso, mientras la chica suspira.

 

Marta: ¡Mierda!

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / TARDE

 

Suena “El alud”, de Vega.

 

Lucas, pensativo, organiza las tazas de una de las estanterías cuando Jaime sale del almacén. Al ver al joven duda durante unos segundos, pero finalmente se acerca a él.

 

Jaime: ¿Podemos hablar un momento?

 

Lucas: ¿Qué pasa?

 

Jaime: Es Sergio.

 

Lucas: ¿Te ha convencido para que me despidas?

 

Jaime: No es eso.

 

Lucas: (Extrañado) ¿Entonces?

 

Jaime coge aire antes de volver a hablar.

 

Jaime: Se va de la ciudad.

 

Lucas: (Sorprendido) ¡¿Qué?!

 

Jaime: Y supondrás por qué.

 

Lucas guarda silencio durante unos segundos, pensando.

 

Lucas: ¿Cuándo se va?

 

Jaime: Mañana a primera hora.

 

Lucas: Joder…

 

Los dos guardan silencio durante unos segundos.

 

Jaime: Ve a despedirte de él.

 

Lucas: ¿Ahora?

 

Jaime: Sí. Ahora.

 

Lucas: Pero… ¿y el bar?

 

Jaime: No te preocupes. Yo me encargo.

 

Lucas: ¿De verdad?

 

Jaime: Vete.

 

Tras unos segundos en silencio, Lucas sonríe.

 

Lucas: Gracias.

 

El joven sale corriendo del local, ante la sonriente mirada de Jaime.

 

CÁRCEL DE GIJÓN / CELDA DE CARLOS Y RUBÉN / TARDE

 

Carlos entra en la celda y se sorprende al encontrarse a Rubén sentado en su cama, completamente desnudo y con una enorme sonrisa dibujada en su rostro.

 

Carlos: ¿En serio?

 

Rubén: Chúpamela.

 

Carlos: Rubén…

 

Rubén: (Interrumpiéndole) ¿Es que no me has oído?

 

Tras unos segundos en silencio, Carlos se arrodilla frente al joven y empieza a practicarle sexo oral. Rubén le acaricia el pelo, gimiendo.

 

Rubén: Desde el primer momento que te vi, supe que eras una zorra.

 

CALLES DE GIJÓN / NOCHE

 

Marta camina hacia su portal cuando ve a Isra sentado en el mismo. Tras unos segundos en silencio, la joven suspira mientras se acerca a él.

 

Marta: ¿Qué haces aquí?

 

El joven se levanta.

 

Isra: Tenemos que hablar.

 

Marta: Ahora no es el momento.

 

Isra: Marta…

 

Marta: (Interrumpiéndole) De verdad, Isra, no me apetece hablar ahora.

 

Isra: Solo quiero pedirte disculpas.

 

Marta: Pues ya lo has hecho.

 

Isra: Por favor…

 

Marta: (Interrumpiéndole) Para, Isra. De verdad.

 

Isra: Lo siento.

 

Marta: Adiós.

 

Marta entra en el portal, ante la triste mirada de su amigo.

 

Isra: ¡Mierda!

 

APARTAMENTO DE SERGIO / SALÓN / NOCHE

 

Sergio termina de recoger sus cosas en cajas de cartón cuando suena el timbre. Extrañado, el joven camina hasta la puerta y, al abrirla, se sorprende encontrándose con Lucas al otro lado.

 

Sergio: ¡Lucas!

 

Lucas: Menos mal que te pillo despierto.

 

Sergio: ¿Qué haces aquí?

 

Lucas: Jaime me ha dicho que dejas la ciudad.

 

El joven fuerza una sonrisa.

 

Sergio: Sí.

 

Lucas: ¿Es por mí?

 

Tras unos segundos en silencio, Sergio suspira.

 

Sergio: Es por todo.

 

Lucas: ¿A qué te refieres?

 

Sergio coge aire antes de volver a hablar.

 

Sergio: Aquí siempre me he sentido un poco fuera de lugar.

 

Lucas: Sergio…

 

Sergio: (Interrumpiéndole) Lo tuyo simplemente ha sido la gota que ha colmado el vaso. Nada más.

 

Lucas: Ya.

 

Los dos guardan silencio durante unos segundos.

 

Lucas: Espero que seas muy feliz, Sergio.

 

Sergio: Igualmente.

 

Lucas: Hasta siempre.

 

Sergio: Chao.

 

Ambos se miran unos segundos más en silencio, hasta que finalmente Lucas se aleja de allí y los ojos de Sergio se llenan de lágrimas.

 

 

CONTINUARÁ…