MANERAS DE VIVIR
Séptima temporada, capítulo 143
Fecha de emisión: 25 de junio del 2017
APARTAMENTO DE ANDREA Y CARLOS / COCINA / MAÑANA
Andrea desayuna apoyada en la encimera, ya lista para salir de casa, cuando Carlos aparece por allí, todavía en calzoncillos. Da un pico a su novia.
Carlos: ¿Queda café?
Andrea: Sí. Pero recuerda dejarle también un poco a Jaime.
Carlos: Ya.
El joven se sirve una taza de café.
Carlos: Espero que consiga arreglar las cosas con Claudia.
Andrea: No lo sé. Una vez llegados a ese punto, es muy difícil reconstruir una relación.
Carlos: Sí, supongo…
Los dos jóvenes guardan silencio durante unos segundos.
Carlos: ¿Vas a ir hoy a la facultad?
Andrea: Sí. Y ya veo que tú no.
Carlos: No tengo ninguna clase interesante.
Andrea: Como siempre.
Carlos: Andrea…
La joven mira su móvil y deja la taza en el fregadero, interrumpiendo a su novio.
Andrea: En fin, me tengo que ir ya. Luego nos vemos.
Carlos: Hasta luego.
Andrea sale del apartamento. Carlos se apoya en la encimera, suspirando. Jaime aparece por allí, en pijama.
Jaime: Como no arregléis las cosas pronto… vais a acabar como Claudia y yo.
Carlos: (Molesto) Voy a darme una ducha.
Carlos camina hacia el baño mientras Jaime se sirve algo de café, aunque no queda mucho.
Jaime: (Irónico) Estupendo.
CASA DE HUGO E ISRA / SALÓN / MAÑANA
Hugo y Sergio, vestidos y ya listos para irse a trabajar, desayunan tranquilamente sentados en el sofá. Los dos tienen enormes sonrisas dibujadas en sus rostros
Sergio: Tengo que reconocer que hacía tiempo que no era tan feliz.
Hugo: Mira que eres exagerado.
Sergio deja escapar una sonora carcajada.
Sergio: Te hablo en serio.
Hugo: Bueno, pues… me alegro de ser parte de esa felicidad.
Los dos jóvenes se miran fijamente a los ojos, sin borrar las sonrisas de sus caras.
Sergio: ¿Sabes? Me gustaría conocer a tus amigos.
Hugo: (Sorprendido) ¿Qué?
Sergio: Pues eso, no sé… tengo curiosidad.
Hugo: Ya…
Ambos guardan silencio durante unos segundos.
Hugo: ¿No es un poco pronto?
Sergio parece decepcionado con la reacción del chico, pero intenta disimularlo con una forzada sonrisa.
Sergio: Sí, tienes razón… no quería agobiarte. Cuando tú quieras y estés preparado.
Sergio sigue bebiéndose el café en silencio mientras Hugo le observa, preocupado.
CON
CALLES DE GIJÓN / MAÑANA
Claudia y Hugo pasean por las calles de la ciudad, en silencio. El joven se fuma un cigarro mientras su amiga se toma un refresco.
Hugo: Me ha sorprendido que vinieras a verme en el descanso.
Claudia: (Sonríe) La verdad es que desde que salí del centro apenas hemos hablado, y no sé… me apetecía.
Hugo: Sí, nos lo merecíamos. Pero a ver si sacas un poco más de tiempo que no sea mi media hora de descanso.
La joven deja escapar una sonora carcajada.
Claudia: Hecho.
Los dos jóvenes vuelven a guardar silencio, hasta que Claudia suspira.
Claudia: Bueno, ¿y me vas a contar lo que pasa?
Hugo: (Extrañado) ¿Qué pasa?
Claudia: Vamos, que me he dado cuenta cuando he entrado. Entre ese chico, Sergio, y tú… no sé, había como tensión, ¿no?
Ahora es Hugo el que hace una pausa, pensando.
Hugo: Llevamos una semana acostándonos.
Claudia: ¡¿En serio?! ¡Pero eso es genial! Quiero decir, está buenísimo… y ya era hora de que te llevaras una alegría al cuerpo.
Hugo: Ya…
Claudia: ¿Pero entonces cual es el problema?
Hugo: Quiere conoceros.
Claudia: (Extrañada) ¿Conocernos?
Hugo: Sí. A mis amigos, ya sabes. Y no sé… ¿no te parece demasiado pronto? Solo llevamos una semana acostándonos, ni siquiera sé si esto va a ir a más.
Claudia: ¿Y qué pasa si no va a más? Nada. No hay nada en que lo conozcamos, pase lo que pase luego no te vamos a juzgar.
Hugo: Sí, pero…
Claudia: (Interrumpiéndole) Mira, hace tiempo que no te veo sonreír como has sonreído hace un momento cuando me hablabas de él. A lo mejor no va a más, pero a lo mejor sí. No lo estropees ya por esa tontería. De verdad, Hugo. Hay veces que todo empieza como un pequeño problema que no solucionas… y al final se acaba yendo todo a la mierda.
Hugo mira a su amiga, sin saber qué decir.
PISO DE MARTA / SALÓN / MAÑANA
Marta, agobiada, camina rápidamente hacia la puerta, mientras el timbre suena insistentemente.
Marta: Ya va, ya va.
La joven llega hasta la puerta y se sorprende cuando, al abrirla, se encuentra con un desmejorado Isra al otro lado.
Marta: ¡Isra!
Isra: ¿Estás sola?
Marta: Sí… pasa. Pasa, anda.
Isra: Gracias.
El pelirrojo entra en el piso mientras Marta cierra la puerta, sin poder ocultar su preocupación.
SEDE “RTPA”/ SALA DE CÁMARAS / MAÑANA
Hugo entra en la sala tras pasar el descanso con Claudia. Sergio está sentado en el sofá, leyendo una revista, pero cuando ve al joven la cierra esbozando una amplia sonrisa.
Sergio: Me ha caído bien tu amiga.
Hugo: (Suspira) No empieces con eso otra vez, Sergio. Te lo pido por favor.
Sergio: Vale, tienes razón. Perdona.
El joven se levanta y se acerca hacia Hugo, sin borrar la sonrisa de su rostro.
Sergio: No volveré a insistir más. Pero al menos dame un beso.
Hugo: (Asustado) ¿Aquí?
Sergio: Venga, que no va a entrar nadie.
Hugo deja escapar una sonora carcajada.
Hugo: Bueno…
Los dos jóvenes están a punto de besarse cuando entra Óscar en la sala, que se sorprende al verles así.
Óscar: Oh disculpad, no sabía que… yo no… lo siento.
El joven vuelve a salir de la sala, y Hugo apoya la cabeza en el hombro de su novio.
Hugo: Mierda.
Sergio no puede evitar el echarse a reír, divertido.
FACULTAD DE TURISMO / AULA 426 / MAÑANA
Andrea mira a Félix mientras sus compañeros van saliendo de la clase. Tras dudar durante unos segundos, se dirige a él.
Andrea: Disculpa, Félix… ¿podría hablar un segundo contigo?
Félix: (Sonríe) Por supuesto.
Andrea: Me gustaría saber… ¿qué problema hay con mi trabajo?
Félix deja escapar una sonora carcajada. Mira a su alrededor: los alumnos ya han salido del aula.
Félix: Sabes perfectamente el problema que hay. Le falta el extra.
Andrea: (Extrañada) ¿Qué extra?
Félix: Ya sabes a qué extra me refiero.
Andrea intenta mantener la compostura, pero los nervios empiezan a apoderarse de ella.
Andrea: Félix…
Félix: (Interrumpiéndola) ¿Por qué no te pasas luego por mi despacho y arreglamos todo esto?
Andrea está a punto de responder, pero se ve interrumpida por alguien desde la puerta.
Carlos: (Off) ¿Andrea?
Profesor y alumna se giran hacia allí, sorprendidos.
Andrea: ¡Oh, Carlos! No sabía que ibas a venir a buscarme.
Carlos: Ya, bueno… pensé que podríamos comer por ahí, pero si estás ocupada…
La joven le interrumpe, esbozando una forzada sonrisa mientras se acerca a él.
Andrea: No, no… vámonos. Hasta mañana, profesor.
Félix: (Suspira) Adiós, Andrea.
Andrea y Carlos salen de allí, pero antes el joven dirige una confundida mirada a Félix, que se sienta en la silla suspirando.
PISO DE MARTA / DORMITORIO DE MARTA / TARDE
Isra abre lentamente los ojos, y no tarda en darse cuenta de que está tumbado en la cama de su amiga. Intenta incorporarse, y la joven no tarda en aparecer por allí.
Marta: Oh, ya te has despertado.
Isra: Sí…
Marta: ¿Cómo te encuentras?
El joven fuerza una sonrisa.
Isra: Mejor… mejor, muchas gracias.
Marta: (Sonríe) Gracias.
Marta se sienta en el borde de la cama, mirando a su amigo, y los dos guardan silencio durante unos segundos.
Isra: Mira Marta, yo… cuando vine esta mañana, lo que quería era pedirte perdón.
Marta: Isra…
Isra: (Interrumpiéndola) No Marta, escúchame. Por favor.
Vuelven a guardar silencio durante unos segundos.
Isra: Siento muchísimo todo lo que te he hecho pasar. Me he portado fatal contigo, y tú lo único que has intentado siempre es ayudarme.
Marta: Somos amigos, ¿no? Y para eso estamos. Sé que estás pasando una mala racha, y no te lo voy a tener en cuenta. De verdad.
Isra: Ya…
Isra vuelve a guardar silencio durante unos segundos, pensando.
Isra: Tengo que contarte algo más.
Marta: ¿El qué?
Isra: La semana pasada… te robé las llaves del apartamento de Iván y entré. Me llevé todo el dinero que encontré.
Marta: (Suspira) Joder, Isra…
El pelirrojo rompe a llorar, desesperado.
Isra: Estoy muy mal, Marta… muy mal.
Marta: Ven aquí, anda…
Los dos amigos se abrazan. Isra no puede parar de llorar.
Isra: Necesito ayuda, Marta… mucha ayuda.
Marta: Y la tendrás. Te lo prometo.
Ambos continúan abrazados, sin decir nada más.
APARTAMENTO DE ANDREA Y CARLOS / SALÓN / TARDE
Carlos y Andrea llegan al apartamento, que está completamente vacío. Entran en el salón, en silencio.
Andrea: ¿Y Jaime?
Carlos: Imagino que estará en el “Four”.
Andrea: Claro, es verdad.
La joven se sienta en el sofá, suspirando, ante la preocupada mirada de su novio.
Carlos: ¿Me vas a decir de una vez lo que te pasa, Andrea?
Andrea: (Molesta) ¿Otra vez vas a empezar con eso?
Carlos: Has estado toda la comida muy callada, y… te he visto hoy con tu profesor. No quiero que pienses que estoy celoso, de verdad, ya sé que no hay nada entre vosotros, pero… era raro.
Andrea se pone nerviosa, aunque intenta disimularlo.
Andrea: No digas tonterías, Carlos.
Carlos: No son tonterías, Andrea, y lo sabes.
La joven guarda silencio durante unos segundos, pensando, hasta que finalmente suspira a la vez que se levanta del sofá.
Andrea: No quiero hablar de eso ahora.
Carlos: Pero…
Andrea se encamina hacia el dormitorio, sin dejar que su novio termine la frase. Éste se sienta en el sofá, suspirando.
CASA DE HUGO E ISRA / DORMITORIO DE HUGO / TARDE
Hugo y Sergio están tumbados en la cama del joven. Una fina sábana es lo único que cubre sus cuerpos desnudos. Sergio acaricia el pelo de su novio, mientras éste, apoyado en su pecho, parece sumergido en sus pensamientos.
Sergio: Diez euros por tus pensamientos.
Hugo: Estás que lo tiras.
Sergio se ríe, divertido.
Sergio: Va, en serio. ¿En qué estás pensando?
Hugo guarda silencio durante unos segundos.
Hugo: ¿De verdad quieres conocer a mis amigos?
Sergio: Ya te dije que no quiero agobiarte con eso.
Hugo: Ya… pero no sé. Esta noche hemos quedado casi todos en el “Four”, y he pensado que a lo mejor te apetecería venir conmigo.
Sergio: (Sorprendido) ¿Lo dices en serio?
Hugo: Completamente.
Sergio: Me encantaría.
Hugo: (Sonríe) Estupendo.
Los dos jóvenes se besan, felices.
FACULTAD DE TURISMO / DESPACHO DE FÉLIX / TARDE
Sentado tras el escritorio de su despacho, Félix corrige unos trabajos cuando escucha unos suaves golpes en la puerta.
Félix: Adelante.
La puerta se abre, dando paso a Carlos.
Carlos: Disculpe, ¿podría hablar un segundo con usted?
Félix: (Extrañado) Eres el novio de Andrea, ¿verdad?
Carlos: Sí.
Félix: Pues la verdad es que estoy muy ocupado.
Carlos: No se preocupe, será solo un momento.
El joven entra al despacho cerrando la puerta tras él, ante la atónita mirada del profesor.
Félix: Disculpa, pero…
Carlos: Quiero que se aleje de Andrea.
Félix: (Atónito) ¿Qué?
Carlos: Mire, no sé lo que habrá entre vosotros ni quiero saberlo, pero es obvio que lo que he visto esta mañana no es una relación de profesor y alumna. Ella está muy rara conmigo, y no voy a permitir que usted se entrometa en nuestra relación.
Félix: Perdona, pero no voy a consentir que me hables así.
Carlos: Es que usted no me tiene que consentir nada. No es mi profesor.
Félix está a punto de responder, pero Carlos no le da tiempo. Sale del despacho dando un fuerte portazo.
PISO DE MARTA / DORMITORIO DE MARTA / NOCHE
Marta e Iván están sentados en la cama, tomándose cada uno un refresco. La joven ya tiene puesto el pijama.
Isra: Siento muchísimo haber jodido tu relación con Iván, Marta.
La joven fuerza una sonrisa.
Marta: No tienes que preocuparte por eso, Isra. Lo importante ahora es que tú te pongas bien, y ya está.
Isra: No. Tú lo único que has hecho es intentar ayudarme, y yo… yo te he jodido la vida.
Marta: Bueno, bueno, tampoco seas exagerado… a lo mejor Iván no era el adecuado, eso es todo.
Isra: ¿De verdad crees eso?
Marta mira a su amigo, sin saber qué decir. Ahora es Isra el que fuerza una sonrisa.
Isra: Ya.
Los dos jóvenes guardan silencio durante unos segundos.
Isra: Mira, yo no voy a volver a entrometerme entre vosotros. De verdad. Te mereces ser feliz, y si crees que junto a él vas a serlo, entonces intenta arreglar las cosas. Yo puedo ayudarte, puedo ir a hablar con él, o…
Marta: (Interrumpiéndole) No creo que eso sea buena idea.
Ambos se ríen, para después guardar silencio durante unos segundos.
Marta: ¿Te importa si me cambio y…?
Isra le interrumpe, con una enorme sonrisa dibujada en su rostro.
Isra: Ve.
Marta: Siempre voy a estar a tu lado. Lo sabes, ¿verdad?
Isra: Claro que lo sé.
Marta da un beso en la mejilla a su amigo.
Marta: No tardaré.
Isra: Tarda el tiempo que haga falta.
La joven se levanta y corre hacia el baño, ante la feliz sonrisa del pelirrojo.
BAR “FOUR” / INTERIOR / NOCHE
Suena la canción “It’s my life”, de Bon Jovi.
Andrea, Carlos, Claudia, Óscar, Lucas y Jaime están sentados en uno de los sofás, tomándose cada uno una cerveza, mientras charlan entre ellos animadamente aunque se puede notar ciertas tensiones en el ambiente.
Óscar: ¿Hugo al final no viene?
Andrea: Me ha mandado un whatsapp hace como diez minutos, que se retrasaba un poco.
Claudia: Para variar.
Justo en ese momento Hugo y Sergio entran en el local y, al verles se acercan a ellos.
Hugo: Hola chicos, perdonad el retraso.
Lucas: (Sorprendido) ¡Sergio!
Óscar: (Suspira) No me lo puedo creer…
Sergio: (Sonríe) Hola.
Hugo: Bueno chicos, yo… quería presentaros a Sergio, un compañero de trabajo. Nosotros… bueno, nos estamos conociendo.
Claudia: Nos hemos visto esta mañana.
Sergio: Sí. Encantado de conoceros a todos.
Jaime: Igualmente.
Carlos: Pero sentaros, no os quedéis ahí como retrasados.
Entre risas, los recién llegados se sientan.
Lucas: Oye, pues no tenía ni idea, pero me alegro muchísimo por vosotros, ¿eh? Hacéis buena pareja.
Óscar: (Irónico) Sí… estupenda.
Lucas mira a su novio, extrañado por su actitud.
APARTAMENTO DE IVÁN / RELLANO / NOCHE
Marta espera nerviosa frente a la puerta cuando ésta se abre. Iván, al verla, se muestra muy sorprendido.
Iván: ¡Marta! ¿Qué haces aquí?
Marta: Me gustaría hablar un segundo contigo.
Iván: Creo que tú y yo ya hemos hablado de todo lo que teníamos que hablar.
Marta: Lo siento, Iván. De verdad.
Iván suspira, intentando mantener la calma.
Iván: ¿Te das cuenta de que es la segunda vez que haces esto en una semana?
Marta: Sí, pero ahora las cosas son diferentes.
Iván: (Extrañado) ¿Diferentes en qué?
Marta: Isra está en mi casa. Ha reconocido que fue él el que robó en tu apartamento, y…
Iván: (Interrumpiéndola) O sea que ahora ya me crees, ¿no?
Marta: Iván, por favor… me ha pedido ayuda. Está dispuesto a curarse.
Iván: Bien. Me alegro por él.
Marta: Tienes que entender que es mi amigo, y que tengo que estar a su lado en este proceso. Yo, y todos.
Iván: Por supuesto.
Marta: Pero… de quién estoy enamorada es de ti. Quiero estar contigo, y no quiero que nada vuelva a interponerse en nuestra relación.
Iván: No es tan fácil, Marta. Yo también estoy enamorado de ti y lo sabes, pero me ha dolido mucho todo lo que ha pasado.
Marta: Lo sé, y por eso te pido perdón. Pero te prometo que no volverá a pasar. Ahora que está dispuesto a curarse, tengo que ayudarle, pero… eso no va a quitar para que te dedique tiempo a ti. A la persona de la que estoy enamorada.
Iván guarda silencio durante unos segundos, pensando.
Iván: Poco a poco, ¿vale? No cierro puertas, pero necesito ver que puedo confiar en ti.
Marta: (Sonríe) Te lo demostraré. Te lo prometo.
Los dos vuelven a guardar silencio durante unos segundos.
Iván: ¿Quieres pasar?
Marta: Por supuesto.
Marta entra en el apartamento mientras Iván cierra la puerta, sin poder evitar el esbozar una feliz sonrisa.
APARTAMENTO DE LUCAS Y ÓSCAR / SALÓN / NOCHE
Lucas: (Enfadado) ¿Qué coño ha sido eso?
Óscar cierra la puerta del apartamento, extrañado.
Óscar: ¿El qué?
Lucas: Tu actitud con Sergio y Hugo. Joder Óscar, has sido súper desagradable.
Óscar: Oh, venga, no seas exagerado.
Lucas: ¿Exagerado? ¿Crees que estoy siendo exagerado?
Óscar: Bueno, simplemente no me hace gracia que estén juntos. No sé, no creo que Sergio sea de fiar.
Lucas: (Irónico) Sí, seguro que es solo por eso.
Óscar: (Molesto) ¿Qué estás insinuando?
Los ojos de Lucas se llenan de lágrimas. Intenta tranquilizarse.
Lucas: Tienes que olvidarte de él, Óscar. Yo te quiero, pero no sé cuánto tiempo voy a poder aguantar esto.
Óscar: Lucas…
Lucas: (Interrumpiéndole) Dormiré esta noche en casa de un amigo. Hablamos mañana.
El joven sale del apartamento, ante la atónita mirada de Óscar. El joven se acaba sentando en el sofá, suspirando.
Óscar: ¡Mierda!
Rompe a llorar.
CONTINUARÁ…