MANERAS DE VIVIR

 

Sexta temporada, capítulo 126

 

Fecha de emisión: 4 de enero del 2014

 

PISO DE JAIME Y CLAUDIA / DORMITORIO DE JAIME Y CLAUDIA / MAÑANA

 

Empieza a sonar “Yesterday”, de The Beattles.

 

Jaime, que dormía plácidamente sobre la cama mientras los primeros rayos de sol se cuelan a través de la ventana, saca una de las manos de entre las sábanas y apaga el despertador. Va abriendo poco a poco los ojos y, cuando está completamente despierto, se despereza.

 

Jaime: Buenos días…

 

El chico no obtiene respuesta.

 

Jaime: ¿Claudia?

 

Sigue sin escuchar nada. Extrañado, se gira, dándose cuenta de que el lado en el que duerme Claudia está vacío. El joven suspira.

 

Jaime: Mierda…

 

Jaime se levanta de la cama y se encierra en el baño, dando un fuerte portazo.

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / MAÑANA

 

Suena la canción “Operate”, de Three Days Grace.

 

Óscar y Lucas están sentados en uno de los sofás. Mientras en la mesa reposan dos tazas de café prácticamente intactas, ellos se besan apasionadamente, entre risas. Isra entra en el local y se acerca a ellos, con cara de asco.

 

Isra: Por favor… ¿no habéis pensado en cogeros una habitación en cualquier hotel?

 

Los dos chicos se ríen, divertidos.

 

Óscar: Vamos, estamos en el principio de la relación, déjanos disfrutar.

 

Isra: Ya, bueno, con Hugo después de un año estabais todavía igual.

 

Lucas y Óscar miran al pelirrojo, incómodos. Éste enseguida se da cuenta de que ha metido la pata.

 

Isra: Bueno, yo… será mejor que me vaya a pillar algo para tomar. Hasta ahora.

 

Isra se dirige hacia la barra. Óscar mira a su novio y esboza una forzada sonrisa, mientras el joven sigue sintiéndose bastante incómodo.

 

Óscar: Lo siento…

 

CANCIÓN: “Bed of roses”, de Bon Jovi

 

Kristen Bell, Chace Crawford, Rupert Grint, Vanessa Hudgens, Jesse McCartney, Jesse Metcalfe, Jared Padalecki, Hayden Panettiere, Shawn Pyfrom, Jessica Stroup

 

CAPÍTULO 126: Viejos conocidos

 

CALLES DE GIJÓN / MAÑANA

 

Marta y Esperanza pasean por las calles de la ciudad, cogidas de la mano. La niña se va comiendo una piruleta.

 

Esperanza: ¿Mañana tendré que ir al cole?

 

Marta: Por supuesto. Ya tendrías que haber ido hoy, pero me has engañado de mala manera para quedarte en casa.

 

La niña se ríe, divertida, y su madre finge enfadarse.

 

Marta: Pues a mí no me hace ninguna gracia.

 

Esperanza: ¡Claro que sí!

 

Ahora son las dos las que se ríen.

 

Iván: (Off) ¿Marta?

 

La joven se gira, sorprendida.

 

Marta: ¡Iván!

 

El chico se acerca a ellas, con una amplia sonrisa dibujada en su rostro.

 

Iván: ¡Cuánto tiempo! ¿Cómo te va?

 

Marta fuerza una sonrisa.

 

Marta: Bien, ¿y a ti?

 

Iván: No me puedo quejar.

 

Marta: Ya. Me alegro.

 

Iván: Y yo por ti.

 

Surge un tenso silencio entre ellos, hasta que Iván se agacha frente a Esperanza.

 

Iván: ¿Y tú eres Esperanza?

 

Esperanza: Sí. ¿Tú quién eres?

 

Iván: Soy un amigo de mami.

 

Esperanza: No te había visto nunca.

 

Iván: Ya… es que hace mucho que no nos vemos.

 

Esperanza: Entonces no seréis tan amigos.

 

Marta: (Molesta) ¡Esperanza!

 

Iván se levanta, todavía sonriendo.

 

Iván: No te preocupes.

 

Vuelven a quedarse en silencio.

 

Marta: Bueno, nosotras… nos tenemos que ir.

 

Iván: ¿Te apetecería cenar conmigo algún día?

 

Marta: (Atónita) ¿Perdona?

 

Iván: Me gustaría hablar contigo… en privado.

 

La joven medita su respuesta durante unos segundos.

 

Marta: Está bien, supongo que una cena no me hará daño… sigo teniendo el mismo número de teléfono, ¿aún lo guardas?

 

Iván: Sí.

 

Marta: Entonces espero tu llamada. Hasta pronto.

 

Iván: Chao.

 

Marta y Esperanza se alejan de allí, cogidas de la mano, ante la sonriente mirada del joven.

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / MAÑANA

 

Suena la canción “Mejor mañana” de Vega.

 

Jaime está tras la barra, leyendo una revista, cuando Claudia entra en el local. Unas grandes ojeras rodean sus ojos. Su marido la observa, preocupado.

 

Jaime: ¿Estás bien?

 

La chica esboza una forzada sonrisa.

 

Claudia: Perfectamente.

 

Jaime: Pues no lo parece. ¿Dónde has ido esta mañana tan temprano?

 

Claudia: Tenía unas cosas que hacer.

 

Jaime: ¿Qué cosas?

 

Claudia: (Molesta) ¿En serio tengo que darte explicaciones?

 

Jaime: Claudia…

 

Claudia: (Interrumpiéndole) Voy al baño.

 

Claudia se aleja de allí, ante la preocupada mirada de su marido.

 

PLAYA DE GIJÓN / TARDE

 

Óscar y Lucas, en bañador, se besan apasionadamente tumbados en la arena, sobre sus toallas. Ríen, divertidos. Ninguno de los dos se da cuenta de que Andrea y Hugo están a escasos metros de ellos. Mientras la joven coloca su toalla sobre la arena, Hugo les observa, celoso. Su amiga enseguida se da cuenta.

 

Andrea: ¿Estás bien?

 

El chico esboza una forzada sonrisa.

 

Hugo: Sí. Perfectamente.

 

Andrea: Hugo…

 

Hugo: (Interrumpiéndola) En serio Andrea, ya te dije que lo llevo estupendamente. Me alegro de que sean felices.

 

Los dos amigos se quedan unos segundos en silencio.

 

Hugo: Por cierto, me acabo de acordar de que me he dejado el tabaco en casa. Voy al estanco de ahí enfrente a por un paquete, ahora vuelvo.

 

Andrea, preocupada, observa como su amigo se aleja de allí.

 

RESTAURANTE “69 PÉTALOS” / INTERIOR / NOCHE

 

Un restaurante muy elegante. Marta e Iván están sentados en una de las mesas. Ella con un bonito vestido negro, y él con traje y corbata. La joven sonríe.

 

Marta: Menos mal que me avisaste de que vendríamos a un sitio elegante. Si no, habría hecho el ridículo.

 

El chico se ríe, divertido.

 

Iván: Habrías estado preciosa igualmente.

 

Marta: Pelota.

 

Ahora son los dos jóvenes los que se ríen, divertidos, aunque pronto vuelve a quedar en silencio. Iván carraspea.

 

Iván: Bueno, yo… lo que quería hacer primero de todo, incluso antes de cenar, es pedirte disculpas.

 

Marta: (Extrañada) ¿Pedirme disculpas?

 

Iván: Sí. Por cómo me comporté el año pasado. Fui un estúpido, no debí tratarte como te traté… y no sabes cómo lo siento.

 

La joven guarda silencio durante unos segundos, pensando, hasta que finalmente suspira.

 

Marta: ¿Crees que si no te hubiera perdonado estaría aquí?

 

Iván: (Sorprendido) ¿Lo dices en serio?

 

Marta: Por supuesto. Hace tiempo ya que aprendí que el rencor no lleva a ninguna parte, así que por mí, borrón y cuenta nueva.

 

Iván: (Sonríe) Estupendo.

 

Marta le devuelve la sonrisa, contenta.

 

CASA DE HUGO, ISRA Y ANDREA / DORMITORIO DE HUGO / NOCHE

 

Hugo cabalga salvajemente sobre Alberto. Los dos jóvenes disfrutan, desnudos y sudorosos, mientras se besan apasionadamente.

 

Alberto: ¡Dios!

 

Hugo: ¡Joder!

 

El joven se desploma sobre su novio, y vuelven a besarse.

 

Alberto: (Suspira) Ha sido estupendo.

 

Hugo: (Sonríe) Sí.

 

Siguen besándose. Hugo acaricia el pecho de su novio y poco a poco va bajando, hasta que llega a su pene, que vuelve a estar erecto.

 

Alberto: (Sorprendido) ¿Otra vez?

 

Hugo: ¿No te apetece?

 

Alberto: Llevamos cuatro.

 

Hugo: El cinco es un número precioso.

 

Alberto no puede evitar el echarse a reír mientras se besan de nuevo apasionadamente y Hugo le sigue acariciando.

 

CALLES DE GIJÓN / NOCHE

 

Iván y Marta pasean por las calles de la ciudad charlando animadamente, entre risas. No tardan en llegar hasta el portal de la joven.

 

Marta: Me lo he pasado genial.

 

Iván: (Sonríe) Sí, yo también. Me encantaría repetirlo.

 

Marta: Cuando quieras.

 

Iván: ¿En serio?

 

Marta: (Sonríe) En serio.

 

El chico le devuelve la sonrisa, y los dos se quedan unos segundos en silencio, mirándose fijamente a los ojos.

 

Iván: Oye, quiero volver a pedirte…

 

Marta le interrumpe dándole un apasionado beso. Al principio el joven se sorprende, pero le acaba correspondiendo.

 

Marta: ¿Te crees ya que te he perdonado?

 

Iván finge pensar durante unos segundos.

 

Iván: No sé yo…

 

Marta se ríe, y vuelven a besarse.

 

Marta: ¿Quieres subir?

 

Iván: Lo estoy deseando.

 

La joven, sonriente, empieza a buscar sus llaves en el bolso mientras su acompañante no puede dejar de acariciarla.

 

PISO DE JAIME Y CLAUDIA / DORMITORIO DE JAIME Y CLAUDIA / MAÑANA

 

El reloj marca las seis de la mañana. De pronto, empieza a sonar “Yesterday”, de The Beattles. Jaime, que dormía plácidamente en su cama, estira la mano para apagar la música. Una vez lo ha hecho, todavía somnoliento, se da media vuelta en la cama. Sus ojos se abren de par en par al ver que Claudia no ha pasado allí la noche. Suspira, irónico.

 

Jaime: ¡Estupendo! Otra vez…

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / MAÑANA

 

Suena la canción “Héroes antagónicos”, de Vega.

 

Un nuevo y soleado día ya ha terminado de amanecer en la ciudad. Óscar y Lucas están sentados en uno de los sofás, tomándose un café cada uno mientras miran unos bocetos de viajes, sonrientes.

 

Óscar: ¿Y a Australia? Siempre he querido ir allí.

 

Lucas: (Irónico) Oh sí, claro… como es tan económico.

 

Óscar deja escapar una sonora carcajada.

 

Óscar: Bueno, si intentamos hacer un esfuerzo, a lo mejor para verano nos lo podemos permitir.

 

Lucas: Supongo que te referirás al verano del 2015, ¿no?

 

Óscar: (Sonríe) Mira que eres exagerado.

 

Lucas está a punto de responder, pero Óscar le besa, impidiéndoselo. Aunque el joven, al principio, intenta resistirse, acaba cediendo. Ninguno de los dos sabe que Hugo, acompañado de Andrea, les observa desde la barra, tomándose otro café. El chico no parece demasiado feliz, y su amiga no tarda en darse cuenta.

 

Andrea: Como sigas mirándoles así, van a acabar explotando.

 

Hugo: (Extrañado) ¿Eh?

 

Andrea: Que dejes de mirarles así. Se van a acabar dando cuenta y se mosquearán… con motivo, créeme.

 

Hugo: No les estoy mirando de ninguna manera.

 

Andrea: Oh, vamos…

 

Molesto, Hugo interrumpe a su amiga mientras se levanta de la butaca.

 

Hugo: Mira Andrea, ya estoy harto. Estás siempre metiéndote en que si les miro, que si no les dejo de mirar, que si me meto en medio, que si no… ¿por qué no me dejas tranquilo y empiezas a preocuparte de tu propia vida, que falta te hace?

 

Andrea, sorprendida por la actitud de su amigo, no sabe muy bien cómo reaccionar.

 

Andrea: Eso… eso no es justo…

 

Hugo: No, claro que no lo es. Como tampoco son justas muchas cosas, pero todos nos jodemos.

 

Hugo sale del local, ante la atónita mirada de su amiga.

 

PISO DE MARTA / COCINA / MAÑANA

 

Marta, sentada en una de las banquetas, se toma un café con la mirada perdida en algún punto de las baldosas. La joven está sumergida en sus pensamientos, que no parecen demasiado alegres. En ese momento aparece Esperanza por allí, todavía en pijama y con cara de sueño.

 

Esperanza: No quiero ir al cole, mamá.

 

Marta: (Extrañada) ¿Aún estás así?

 

Esperanza: Es que…

 

Marta: (Interrumpiéndola) Venga, al baño a prepararte. Al final vamos a llegar tarde.

 

Esperanza: (Enfadada) ¡Jolines!

 

La niña sale de la cocina, refunfuñando. Su madre, suspirando, coge su móvil y busca el número de Iván. Al tenerlo en la pantalla duda, y cuando está a punto de darle al botón de llamada, suena el timbre.

 

Marta: Joder…

 

Marta sale de la cocina y atraviesa el pasillo. Al abrir la puerta, se sorprende al encontrarse a un sonriente Iván al otro lado.

 

Iván: Buenos días.

 

Marta: Yo… pensaba que te habías ido…

 

Iván: Así es. A comprar churros para desayunar.

 

La chica se da cuenta de que el joven no miente al ver que tiene una bolsa entre sus manos llena de churros.

 

Iván: ¿Entonces? ¿Puedo pasar?

 

Marta: (Sonríe) Por supuesto. Pasa.

 

Iván entra en el piso y Marta cierra la puerta, sin borrar la sonrisa de su cara.

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / TARDE

 

Suena la canción “Come back home” de Daniel Powter.

 

Jaime, tras la barra, está escribiendo algo en su móvil cuando Claudia entra en el local, con una forzada sonrisa dibujada en la cara. Su marido, al verla, sale de la barra y se acerca a ella, preocupado.

 

Jaime: ¡Claudia! ¿Dónde has estado? Me tenías muy preocupado.

 

Claudia: Yo… lo siento, no era mi intención. Solo… necesitaba estar sola. Necesitaba pensar.

 

Jaime: (Extrañado) ¿Pensar en qué? ¿Qué te está pasando, Claudia? Últimamente estás rarísima.

 

La joven guarda silencio durante unos segundos, pensando, hasta que finalmente suspira.

 

Claudia: No puedo contártelo, Jaime. Todavía no… no estoy preparada.

 

Jaime: Pero…

 

Claudia: (Interrumpiéndole) Te lo contaré, pero cuando esté lista. No ahora. Lo siento.

 

Claudia entra en el almacén, con los ojos llenos de lágrimas, ante la preocupada mirada de su marido.

 

PISO DE CARLOS Y ÓSCAR / SALÓN / NOCHE

 

Carlos da vueltas de un lado al otro del salón, nervioso. Tiene el móvil pegado a la oreja, esperando que le atiendan una llamada, pero eso parece no suceder. El joven, visiblemente molesto, termina arrojando el teléfono sobre el sofá.

 

Carlos: ¡Mierda!

 

APARTAMENTO DE LIDIA / DORMITORIO DE LIDIA / NOCHE

 

La llamada de Carlos se corta. Lidia y Andrea miran el móvil, tumbadas en la cama y completamente desnudas. Mientras Andrea parece bastante preocupada, su amante esboza una cínica sonrisa.

 

Lidia: ¡Por fin! Espero que no vuelva a llamar. Me está poniendo histérica.

 

Andrea esboza una forzada sonrisa.

 

Andrea: No, no lo creo… Carlos no suele insistir mucho.

 

Lidia, contenta, besa apasionadamente a la joven rubia.

 

Lidia: Me alegra que por fin te estés dando cuenta de que todo lo que te pedía, lo hacía por tu bien.

 

Andrea: Sí…

 

La joven vuelve a besarla.

 

Lidia: Vente a vivir conmigo.

 

Andrea: (Sorprendida) ¡¿Qué?!

 

 

CONTINUARÁ…