MANERAS DE VIVIR

 

Octava temporada, capítulo 175

 

Fecha de emisión: 24 de mayo del 2019

 

APARTAMENTO DE HUGO Y ÓSCAR / COCINA / MAÑANA

 

Óscar, pensativo, se toma un café apoyado en la encimera, cuando Hugo aparece por allí, vistiendo solamente unos calzoncillos. Se acerca a su novio, sonriente, y le da un beso.

 

Hugo: Buenos días.

 

Óscar esboza una forzada sonrisa mientras su novio se empieza a preparar un café.

 

Óscar: Hola.

 

Hugo: ¿Cansado?

 

Óscar: Bueno, me acabo de levantar.

 

Hugo: No has parado de dar vueltas en toda la noche.

 

Óscar: (Extrañado) ¿En serio?

 

Hugo: Y tan en serio. No he pegado ojo gracias a ti.

 

Óscar: Lo siento.

 

Hugo: No me tienes que pedir disculpas, Óscar, pero… ¿por qué no me dices lo que te pasa? Llevas días raro, y empiezo a estar preocupado.

 

Tras unos segundos en silencio, el joven suspira.

 

Óscar: No te preocupes. Es verdad que últimamente estoy un poco más cansado, pero… supongo que será el cambio de estación.

 

Hugo: Nunca te han afectado esas cosas.

 

Óscar fuerza una sonrisa.

 

Óscar: Bueno, siempre hay una primera vez para todo, ¿no?

 

Hugo: Pero es un poco raro.

 

Óscar: Voy a darme una ducha.

 

Hugo: Óscar…

 

Óscar: (Interrumpiéndole) Luego hablamos.

 

Óscar sale de la cocina, ante la preocupada mirada de su novio.

 

APARTAMENTO DE IVÁN / SALÓN / MAÑANA

 

Vero: Tengo que reconocer que me ha sorprendido tu llamada.

 

Iván y Vero permanecen sentados en el sofá, tomándose un café cada uno.

 

Iván: Bueno, supongo que… me ha podido la curiosidad de saber cómo te va.

 

Vero: ¿Solo eso?

 

Iván: Solo eso.

 

Vero: Ya.

 

Los dos guardan silencio durante unos segundos.

 

Vero: Pues me va bien.

 

Iván: ¿De verdad?

 

Vero hace una pausa antes de volver a hablar.

 

Vero: No. La verdad es que no.

 

Iván: Deberías olvidarte de todo esto, Vero. Dejar la ciudad, y empezar una nueva vida.

 

La joven deja escapar una irónica carcajada.

 

Vero: Ni de coña. Voy a vengarme de toda esa gentuza que me ha jodido la vida.

 

Iván: Vero…

 

Vero: (Interrumpiéndole) Y tú vas a ayudarme.

 

Iván: Ya te dije que yo estaba fuera de todo eso.

 

Vero: No tienes más opciones.

 

Iván: Ya te estoy intentando ayudar.

 

Vero: ¿De verdad quieres que abramos el cajón de mierda?

 

Tras unos segundos en silencio, el joven suspira.

 

Iván: Te estás equivocando de pareja.

 

Vero: (Extrañada) ¿Qué?

 

Iván: Con Jaime no vas a conseguir nada.

 

Vero: ¿Entonces?

 

Iván: Carlos y Andrea.

 

Vero: No están juntos.

 

Iván: Pero se quieren y es cuestión de tiempo que vuelvan, a no ser que alguien se meta por medio. Carlos intenta negarse sus sentimientos y, quizá, si encuentra a alguien con quien desfogarse…

 

Tras unos segundos en silencio, la joven esboza una cínica sonrisa.

 

Vero: ¿Ves cómo hacemos un fantástico equipo?

 

Iván mira a la joven, sin saber qué decir.

BAR “FOUR” / BAÑO DE MUJERES / MAÑANA

 

Marta se lava la cara en el lavabo cuando la puerta se abre, dando paso a Isra. Su amiga le mira, extrañada.

 

Marta: ¿Qué haces?

 

Isra: ¿Tú qué crees?

 

El pelirrojo besa apasionadamente a la joven y, aunque esta duda durante unos segundos se acaba apartando.

 

Marta: ¿Estás loco?

 

Isra: (Extrañado) ¿Qué pasa?

 

Marta: Podría pillarnos cualquiera.

 

Isra: Ya sería casualidad.

 

Marta: Isra…

 

El joven la interrumpe besándola de nuevo. Marta le acaba correspondiendo hasta que la puerta vuelve a abrirse. Esta vez es Claudia la que entra y los mira, atónica. Se separan rápidamente.

 

Marta: Claudia…

 

Claudia: (Interrumpiéndola) Lo siento. No… no quería interrumpiros.

 

Isra: Escucha…

 

Claudia: (Interrumpiéndole) No, no, seguid. De verdad. Lo siento.

 

Claudia sale del baño, confundida.

 

Marta: Te lo dije.

 

Isra: ¿Qué vamos a hacer?

 

Marta: No lo sé

 

Tras unos segundos en silencio, el joven suspira.

 

Isra: ¡Mierda!

 

Marta mira a su amigo, preocupada.

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / MAÑANA

 

Suena “De la Tierra hasta Marte”, de Alfred García.

 

Hugo se toma un café sentado en una de las butacas de la barra, pensativo, cuando Jaime se acerca a él, con una forzada sonrisa dibujada en su rostro.

 

Jaime: ¿Todo bien?

El joven fuerza una sonrisa.

 

Hugo: Sí.

 

Jaime: Venga, cuéntame lo que te preocupa.

 

Tras unos segundos en silencio, Hugo suspira.

 

Hugo: Es Óscar.

 

Jaime: ¿Habéis discutido?

 

Hugo: No, no exactamente.

 

Jaime: Entonces eso es peor.

 

Hugo coge aire antes de volver a hablar.

 

Hugo: Me está ocultando algo.

 

Jaime: (Sorprendido) ¿Crees que te está poniendo los cuernos?

 

Hugo: No, no tiene nada que ver con eso.

 

Jaime: Pues cada vez entiendo menos.

 

Hugo: No sé, es… lleva unas semanas muy raro.

 

Jaime: ¿Y le has preguntado?

Hugo: Sí, pero se pone nervioso y me cambia de tema. O me esquiva, que no sé qué es peor.

 

Jaime: Sí. La verdad es que no pinta bien.

 

Los dos amigos guardan silencio durante unos segundos.

 

Hugo: No sé qué hacer.

 

Jaime: Te lo acabará contando, Hugo.

 

Hugo: ¿Tú crees?

 

Jaime: Claro que sí. Te quiere muchísimo, y no querrá preocuparte. Solo será eso.

 

Tras unos segundos en silencio, Hugo suspira.

 

Hugo: Ojalá, Jaime… ojalá sea eso.

 

Jaime mira a su amigo, sin saber qué decir.

 

PLAYA DE GIJÓN / MAÑANA

 

Pensativa, Andrea permanece sentada a la orilla del mar, dejando que el agua moje sus pies, pensativa, cuando Vero se sienta a su lado.

 

Vero: Hola.

 

Andrea: (Suspira) ¿Qué haces aquí?

 

Vero: Estaba dando un paseo, y te he visto.

 

Andrea: Ya.

 

Un tenso silencio surge entre las dos jóvenes.

 

Vero: ¿Cómo te va todo?

 

Andrea: (Atónita) ¿Estás intentando que tengamos una conversación?

 

Vero: (Extrañada) ¿Cuál es el problema?

 

Andrea: Nunca hemos sido amigas.

 

Vero: Sí, pero creo que ahora tenemos más cosas en común que nunca.

 

Andrea: (Atónita) ¿Lo dices en serio?

 

Vero: Las dos estamos solas.

 

Andrea: Yo no estoy sola.

 

Vero: Ah, ¿no?

 

Andrea: No.

 

Vero: No veo aquí a mucha más gente.

 

Andrea: Tengo a Hugo. Y a Marta.

 

Vero deja escapar una sonora carcajada.

 

Vero: Hugo y Marta. Ya.

 

Andrea: (Extrañada) ¿Qué pasa?

 

Vero: ¿Carlos?

 

Andrea coge aire, intentando mantener la calma.

 

Andrea: ¿A qué has venido, Vero?

 

Vero: Solo a charlar, ya te lo he dicho.

 

La joven se levanta, suspirando.

 

Andrea: Pues yo creo que ya hemos hablado lo suficiente.

 

Andrea empieza a alejarse de allí, ante la cínica mirada de la chica.

 

Vero: No tienes ni puta idea, Andrea… ni puta idea.

 

APARTAMENTO DE HUGO Y ÓSCAR / SALÓN / TARDE

 

Sentado en el sofá, Isra mira a su alrededor, nervioso, cuando Óscar sale de la cocina, con dos botellines de cerveza entre sus manos. Da uno a su amigo.

 

Óscar: Aquí tienes.

 

Isra: Gracias.

 

Óscar se sienta a su lado.

 

Óscar: ¿Cómo estás?

 

Isra: Pues mal, la verdad es que mal.

 

Óscar: ¿Qué ha pasado?

 

Isra: Tienes que prometerme que no se lo contarás a nadie.

 

Óscar: Por supuesto.

 

Tras unos segundos en silencio, el pelirrojo suspira.

 

Isra: Me he liado con Marta.

 

Óscar: (Sorprendido) ¡¿Qué?!

 

Isra: (Molesto) No he venido aquí para que me juzgues.

 

Óscar: No he dicho nada.

 

Isra: Perdona.

 

Los dos jóvenes guardan silencio durante unos segundos.

 

Isra: Nos ha pillado Claudia.

 

Óscar: (Extrañado) ¿Cómo que os ha pillado?

 

Isra: Besándonos. En el bar.

 

Óscar: Joder…

 

Isra: Lo sé.

 

Los dos guardan silencio durante unos segundos.

 

Óscar: ¿Y ahora qué vas a hacer?

 

Isra: No lo sé. No estoy preocupado por mí, estoy preocupado por Marta. Ella sigue con Iván.

 

Óscar: Eso deberíais haberlo pensado antes.

 

Isra hace una pausa antes de volver a hablar.

 

Isra: Lo sé. Pero eso ahora mismo no me ayuda.

 

Óscar: ¿Y qué quieres que te diga?

 

De nuevo silencio.

 

Óscar: Mira, no creo que Claudia diga nada, pero deberías hablar con ella. Más vale prevenir que curar.

 

Isra: ¿Y qué le digo?

 

Óscar: La verdad. Lo mismo que me has dicho a mí.

 

Isra mira a su amigo, sin saber qué decir.

 

CALLES DE GIJÓN / TARDE

 

Hugo camina por las calles de la ciudad, mirando su móvil, cuando al girar una esquina, se topa con Lucas. Éste, al verle, parece incómodo, aunque fuerza una sonrisa.

 

Lucas: Hola.

 

Hugo: ¿Qué hay?

 

Lucas: No mucho, la verdad.

 

Hugo: No he oído eso. ¿Cómo va tu nuevo trabajo?

 

Lucas: Ah, muy bien. Sí, la verdad es que estoy muy contento… y todo gracias a Óscar. Se ha portado muy bien conmigo.

 

Hugo: Ya veo.

 

Un incómodo silencio surge entre ambos.

 

Lucas: Yo… quería pedirte perdón.

 

Hugo: (Extrañado) ¿Perdón por qué?

Lucas: Bueno, ya sabes, yo estaba muy agradecido a Óscar, y… no sé, supongo que se nos nubló la mente y nos dejamos llevar por la emoción, pero solo fue un beso. De verdad.

 

Hugo: (Atónito) Perdona, pero creo que no te he entendido bien… ¿os besasteis?

 

Lucas: ¿No me digas que he metido la pata? No sé, pensaba que os lo contabais todo, y que lo sabrías.

 

Hugo intenta no perder los papeles.

 

Hugo: Pues no, no lo sabía.

 

Lucas: Lo siento muchísimo, Hugo. De verdad.

 

Hugo: (Irónico) Sí, estoy seguro de ello.

 

El joven se aleja de allí, mientras Lucas esboza una cínica sonrisa.

 

APARTAMENTO DE CARLOS / RELLANO / TARDE

 

Carlos abre la puerta, sorprendiéndose al encontrarse al otro lado con una sonriente Vero, que intenta entrar, aunque el joven se lo impide.

 

Carlos: ¿Qué quieres?

 

Vero: ¿Qué clase de saludo es ese?

 

Carlos: El único que conozco para gente como tú.

 

La joven deja escapar una sonora carcajada.

 

Vero: Por favor, no pierdas nunca ese sentido del humor.

 

Carlos: Vete, Vero.

 

El chico intenta cerrar la puerta, pero la joven se lo impide con el pie.

 

Vero: ¿Por qué no hablamos un rato?

 

Carlos: Porque no tenemos nada de lo que hablar.

 

Vero empieza a acariciar el pecho del joven.

 

Vero: Bueno, entonces… nos podemos divertir un rato, ¿no crees?

 

Carlos: ¿Qué coño estás haciendo?

 

Vero: ¡Vamos! ¡Por los viejos tiempos!

 

Ahora es el joven el que se ríe.

 

Carlos: Estás piradísima.

 

Vero: Y tú amargado. Se nota que lo necesitas.

 

Carlos: Adiós, Vero.

 

Vero: Pero…

 

Sin darle tiempo a reaccionar, Carlos cierra la puerta. Decepcionada, Vero coge el ascensor. Ninguno de los dos se da cuenta de que Andrea, desde el hueco de las escaleras, ha presenciado toda la escena, sonriente.

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / TARDE

 

Suena “Dónde estabas tú”, de Iván Ferreiro & Vega.

 

Tras la barra, Claudia lee una revista cuando Marta entra en el local y se acerca a su amiga, con una forzada sonrisa dibujada en su rostro.

 

Marta: Hola.

 

Claudia mira a la joven, incómoda.

 

Claudia: ¿Qué te pongo?

 

Marta: Un café con leche, por favor.

 

Claudia: Enseguida.

 

La joven no tarda en servírselo.

 

Claudia: Aquí tienes.

 

Marta: Gracias.

 

Las dos amigas guardan silencio durante unos segundos.

 

Marta: Oye, sobre lo de esta mañana…

 

Claudia: (Interrumpiéndola) No tienes que darme explicaciones.

 

Marta: Pero quiero hacerlo.

 

Claudia: No es asunto mío.

 

Marta: Sí, lo sé, pero… eres mi amiga.

 

Claudia: (Suspira) Marta…

 

Marta: (Interrumpiéndola) Le quiero.

 

Claudia: ¿E Iván?

 

Marta: No lo sé, Claudia. Estoy hecha un lío.

 

Las dos amigas guardan silencio durante unos segundos.

 

Claudia: No se merece que le hagas daño.

 

Marta: Bueno, eso es discutible, ¿eh?

 

Claudia: Cuando perdonas, perdonas.

 

Marta: ¿Lo dices desde la experiencia?

 

Claudia: (Molesta) No te pases.

 

Marta: Perdona.

 

Claudia: Da igual.

 

De nuevo silencio.

 

Claudia: Tienes que aclararte, Marta. Los dos te quieren, y no se merecen lo que les estás haciendo.

 

Marta: (Suspira) Lo sé.

 

Las dos amigas, sin saber qué más decir.

 

ESTUDIO DE HUGO Y ÓSCAR / SALÓN / TARDE

 

Sentado en el sofá, Hugo se toma un botellín de cerveza, pensativo, cuando Óscar aparece por allí. Al ver a su novio, fuerza una sonrisa.

 

Óscar: Hola.

 

Hugo: ¿Qué tal? ¿Has estado con Lucas?

 

Óscar: (Extrañado) No, ¿por qué?

 

Hugo: Porque yo sí.

 

El joven se pone nervioso, aunque intenta disimularlo.

 

Óscar: Ah. ¿Y?

 

Hugo: (Levantándose) ¿Es verdad que os besasteis?

 

Óscar: (Sorprendido) ¿Te lo ha dicho?

 

Hugo: Ósea, que es verdad.

 

Óscar: No fue exactamente así. Fue él el que me besó.

 

Hugo: ¿Y crees que eso me va a enfadar menos?

 

Óscar: Hombre, pues…

 

Hugo: (Interrumpiéndole) Me da igual quién besara a quién, Óscar. Lo que me enfada es que me lo ocultaras.

 

Óscar: Porque sabía que te pondrías así, y no tiene la menor importancia.

 

Hugo coge aire, intentando mantener la calma.

 

Hugo: No te confundas, Óscar. Por lo que estoy enfadado no es por el beso, sino por la mentira.

 

Óscar: Hugo…

 

Hugo: (Interrumpiéndole) ¿Sabes? Creo que voy a ir a dar una vuelta. No quiero decir nada de lo que después vaya a arrepentirme.

 

Óscar: ¿Te vas a ir así?

 

Hugo: Ahora mismo es lo mejor, créeme.

 

Óscar: Pero…

 

Hugo: (Interrumpiéndole) Ya hablaremos.

 

Hugo sale del estudio mientras Óscar se sienta en el sofá, con los ojos llenos de lágrimas.

 

APARTAMENTO DE CARLOS / SALÓN / NOCHE

 

Carlos sale de la cocina con dos botellines de cerveza en sus manos. Da uno a Andrea, sentada en el sofá, y luego se sienta a su lado.

 

Andrea: Espero que no te moleste que haya venido sin avisar.

 

El joven fuerza una sonrisa.

 

Carlos: Tranquila.

 

Los dos jóvenes guardan silencio durante unos segundos.

 

Andrea: Os he visto esta tarde.

 

Carlos se pone nervioso, aunque intenta disimularlo.

 

Carlos: ¿A quiénes?

 

Andrea: A Vero y a ti.

 

Carlos: (Suspira) Andrea…

 

Andrea: (Interrumpiéndole) Gracias.

 

Carlos: (Extrañado) ¿Gracias por qué?

 

Andrea: Por haberla rechazado.

 

El chico deja escapar una sonora carcajada.

 

Carlos: No tienes que darme las gracias por eso.

 

De nuevo silencio.

 

Andrea: ¿Lo hiciste por mí?

 

Carlos: (Extrañado) ¿Qué?

 

Andrea: Que si la rechazaste por mí.

 

Tras unos segundos en silencio, Carlos suspira.

 

Carlos: Creo que te voy a decepcionar, pero no, no lo hice por ti. Lo hice por mí.

 

Andrea: Ya.

 

Carlos: No quiero tener nada que ver con esa persona. Y tú también deberías mantenerte alejada de ella.

 

Andrea: Lo sé. Algo planea.

 

Carlos: (Extrañado) ¿Por qué dices eso?

 

Andrea: Hoy se ha acercado a mí en la playa para intentar manipularme.

 

Carlos: ¿Cómo que para intentar manipularte?

 

Andrea: Me ha estado diciendo que tenemos muchas cosas en común, que las dos estamos solas, blablabla.

 

Carlos: Ya.

 

Los dos guardan silencio durante unos segundos.

 

Carlos: Es mejor que nos mantengamos alejados de ella.

 

Andrea: Algo pretende.

 

Carlos: Pero cuanto más tardemos en descubrirlo, mejor.

 

Andrea: Sí. Supongo que sí.

 

Los dos se miran, sin saber qué decir.

 

ESTUDIO DE ISRA / SALÓN / NOCHE

 

Marta mira a su alrededor, con una forzada sonrisa dibujada en su rostro, cuando Isra se acerca a ella, con dos botellines de cerveza entre sus manos. Le da uno a la joven.

 

Marta: Gracias. La verdad es que te está quedando bien.

 

Isra: ¿Te gusta?

 

Marta: Sí.

 

Isra: Tengo que reconocer que está guapo, sí.

 

Los dos jóvenes se ríen.

 

Isra: Pero no creo que hayas venido a alabar mi estudio.

 

Marta: No. La verdad es que no.

 

Isra: ¿Qué pasa, Marta?

 

Tras unos segundos en silencio, la joven suspira.

 

Marta: Esto se tiene que acabar.

 

Isra: (Extrañado) ¿A qué te refieres?

 

Marta: Esto. Lo que quiera que sea.

 

Isra: Marta…

 

Marta: (Interrumpiéndole) No puedo seguir haciéndole esto a Iván.

 

Isra: ¿Le quieres?

 

Marta: Claro que le quiero.

 

Isra: ¿Y a mí?

 

Tras unos segundos en silencio, la joven suspira.

 

Marta: También.

 

Isra: ¿Entonces?

 

Vuelven a guardar silencio durante unos segundos.

 

Marta: ¿Qué quieres que te diga?

 

Isra: La verdad.

 

Marta: Es que no lo sé.

 

Tras unos segundos en silencio, Isra besa apasionadamente a la joven. Esta intenta resistirse, pero finalmente, le corresponde.

 

Isra: ¿Y ahora? ¿Ahora lo sabes?

 

Marta vuelve a besarle.

 

CONTINUARÁ…