MANERAS DE VIVIR

 

Sexta temporada, capítulo 124

 

Fecha de emisión: 5 de diciembre del 2013

 

HOSPITAL GENERAL / SALA DE ESPERA / MAÑANA

 

Claudia está sentada en una de las sillas mirando su móvil, nerviosa. De pronto, una de las consultas abre su puerta y el doctor Martínez sale de su interior.

 

Doctor Martínez: ¿Claudia Antúnez?

 

La chica se levanta, esbozando una forzada sonrisa y guardando su móvil en el bolso.

 

Claudia: Soy yo.

 

Doctor Martínez: Pase, por favor.

 

Claudia entra en la consulta, mientras el médico cierra la puerta.

 

Doctor Martínez: Siéntese.

 

Claudia: Gracias.

 

La joven le hace caso. El doctor Martínez se sienta tras su escritorio.

 

Doctor Martínez: Cuénteme, ¿qué le sucede?

 

Claudia guarda silencio durante unos segundos antes de responder al hombre. Finalmente suspira.

 

Claudia: Creo que no puedo tener hijos.

 

Doctor Martínez: (Extrañado) ¿Disculpe?

 

Claudia: Mi marido y yo llevamos intentándolo meses… y no hay manera.

 

Doctor Martínez: ¿Y por qué sabe que el problema es suyo? ¿Qué hay de su marido?

 

Claudia: Porque… porque las mujeres sabemos esas cosas.

 

El médico la mira unos segundos en silencio.

 

Doctor Martínez: Está bien, haremos las pruebas pertinentes.

 

Claudia: Gracias…

 

CASA DE HUGO, ISRA Y ANDREA / DORMITORIO DE HUGO / MAÑANA

 

Suena la canción “La conjura de los necios”, de Vega.

 

Una mano sale de entre las sábanas. Apaga la música de la alarma y, al volver a dejar el móvil en la mesilla, se cae una fotografía que estaba vuelta de cara a la pared. Hugo saca la cabeza del edredón, extrañado. Coge la fotografía, y ve que se trata de una en la que aparece junto a Óscar, los dos muy felices, sonriendo abrazados. El joven esboza una forzada sonrisa mientras la acaricia.

 

Hugo: No sabes cómo te echo de menos…

 

Al chico se le llenan los ojos de lágrimas.

 

CANCIÓN: “Bed of roses”, de Bon Jovi

 

Kristen Bell, Chace Crawford, Rupert Grint, Vanessa Hudgens, Jesse McCartney, Jesse Metcalfe, Jared Padalecki, Hayden Panettiere, Shawn Pyfrom, Jessica Stroup

 

CAPÍTULO 124: Carrera de fondo

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / MAÑANA

 

Andrea y Carlos están sentados en una de las mesas más apartadas del bar, tomándose cada uno un café y charlando, vigilando siempre que nadie les escuche.

 

Carlos: ¿Entonces la cosa va bien?

 

Andrea: Perfectamente. Creo que no sospecha nada.

 

Carlos: Genial.

 

Andrea: No sé, Carlos. La verdad es que me siento como una puta… porque una cosa es que lo sea por placer, y otra esto.

 

Carlos: Piensa que es para que nos deje en paz. Es bueno para todos.

 

Andrea: (Suspira) Sí, lo sé…

 

Los dos se quedan unos segundos en silencio, hasta que una joven realmente atractiva entra en el local y se acerca a la barra, sonriente.

 

Carlos: Mira a esa…

 

Andrea le hace caso.

 

Andrea: Está buena.

 

Carlos: Buenísima.

 

La joven se ríe, divertida, mientras Carlos se levanta.

 

Carlos: Creo que voy a hablar con ella.

 

Andrea: (Sorprendida) ¿En serio?

 

Carlos: (Extrañado) ¿Por qué no?

 

Andrea: No, por nada. Adelante.

 

Carlos se acerca a la chica esbozando su mejor sonrisa.

 

Carlos: Hola. Soy Carlos.

 

La joven esboza una forzada sonrisa.

 

María: María.

 

Carlos: ¿Puedo invitarte a algo?

 

María: Creo que no.

 

Carlos: Vamos, anímate. Los dueños son mis amigos.

 

María: Ya. Pues les dices a tus amigos que, gracias a lo pesado que eres, han perdido a una cliente. Buenos días.

 

La joven sale del local ante la atónita mirada de Carlos. Andrea se ríe, divertida.

 

PLAYA DE GIJÓN / TARDE

 

Suena la canción “No dejes de soñar”, de Manuel Carrasco.

Hugo está tumbado sobre una toalla en la arena, en bañador pero con la camiseta puesta. Tiene el MP5 puesto mientras lee la novela “Al sur de la frontera, al oeste del sol”, de Haruki Murakami. No se da cuenta de que Óscar y Lucas van paseando por la orilla, cogidos de la mano.

 

Lucas: ¿Ese no es tu ex novio?

 

Óscar mira hacia donde le indica el joven.

 

Óscar: Sí…

 

Lucas: ¿Quieres que nos acerquemos a saludar?

 

Óscar: (Extrañado) ¿Estás seguro?

 

Lucas: Claro. Tengo curiosidad por conocerle.

 

Óscar: Vale…

 

Los dos jóvenes se acercan a él. Hugo, al ver las sombras, mira hacia ellos y se quita los cascos, esbozando una forzada sonrisa.

 

Óscar: Hola.

 

Hugo: ¿Qué hay?

 

Óscar: Nada, dando un paseo… ¿tú qué tal?

 

Hugo: Bien. Me aburría en casa, y he salido a leer un rato.

 

Óscar: Genial.

 

Hugo: Sí…

 

Los tres se quedan unos segundos en silencio.

 

Lucas: Bueno, yo soy Lucas.

 

Óscar: Oh, perdonad. No os he presentado.

 

Hugo, forzando de nuevo una sonrisa, se levanta y estrecha la mano del joven.

 

Hugo: No te preocupes. Yo soy Hugo, encantado.

 

Lucas: Igualmente.

 

Un tenso silencio surge de nuevo entre los tres.

 

Lucas: Estábamos pensando en irnos a tomar algo. ¿Por qué no te vienes y nos conocemos mejor? Óscar me ha hablado de ti.

 

Óscar lanza una mala mirada a su novio. Hugo se da cuenta enseguida.

 

Hugo: Seguro que mal. Pero tranquilos, la verdad es que tengo que irme ya a casa, he quedado para esta noche.

 

El joven coge la toalla y, tras sacudirla, se la echa al hombro.

 

Hugo: Nos vemos.

 

Óscar: Hasta luego.

 

Lucas: Chao.

 

Hugo se aleja de allí. Antes de salir de la playa, echa la vista atrás y se le llenan los ojos de lágrimas al ver a la pareja besándose apasionadamente en la orilla del mar. Lo que no sabe es que Óscar se da cuenta de esa mirada.

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / TARDE

 

Jaime permanece tras la barra, sacando unos vasos del lavavajillas, cuando Claudia entra en el local. Parece triste, aunque tiene una forzada sonrisa dibujada en su rostro. Se acerca a su marido.

 

Claudia: Buenas tardes.

 

Jaime: (Sonríe) Hola.

 

La pareja se da un beso.

 

Jaime: ¿Cómo ha ido la revisión de esta mañana?

 

Claudia: Bien. Sin ningún problema.

 

Jaime: ¿Y por qué estás triste?

 

Claudia: No estoy triste, solo… cansada. Ya sabes que llevo muy mal lo de madrugar.

 

Jaime: Pues has tenido tiempo para acostumbrarte, ¿eh?

 

Claudia: Ya…

 

La joven entra tras la barra y vuelve a besar a su marido.

 

Claudia: Márchate a casa y descansa.

 

Jaime: ¿Seguro que estás bien?

 

Claudia: Segurísimo.

 

Jaime: Vale.

 

Se besan de nuevo.

 

Jaime: Hasta luego.

 

Claudia: Chao.

 

Jaime se aleja de allí, ante la triste mirada de su mujer.

 

CASA DE HUGO, ISRA Y ANDREA / SALÓN / TARDE

 

Andrea y Hugo están sentados en el sofá, viendo la televisión. Los dos jóvenes están en silencio, Andrea prestando atención a la televisión mientras Hugo permanece sumergido en sus pensamientos. De pronto, la joven grita.

 

Andrea: ¡Joder, esta película es horrorosa!

 

La chica, al girarse, se da cuenta de que su mejor amigo ni siquiera se ha inmutado.

 

Andrea: ¡Hugo!

 

Hugo: (Extrañado) ¿Qué?

 

Andrea: ¿Te estás enterando de algo de la película?

 

Hugo: (Suspira) No, la verdad es que no.

 

Andrea: (Preocupada) ¿Qué pasa?

 

El joven esboza una forzada sonrisa.

 

Hugo: Nada.

 

Andrea: Oh, vamos Hugo… sabes que me lo vas a acabar contando, ¿en serio voy a tener que rogarte?

 

Hugo guarda silencio durante unos segundos.

 

Hugo: Esta mañana he visto a Óscar con su novio.

 

Andrea: Ya.

 

Los dos se quedan en silencio durante unos segundos.

 

Andrea: Tú estás con Alberto.

 

Hugo: Sí, pero no sé… no es lo mismo.

 

Andrea: Tienes que aceptarlo, Hugo. Sé que no es lo que quieres oír, pero fuiste tú el que metiste la pata… y él tiene derecho a rehacer su vida.

 

Hugo: Lo sé.

 

Andrea: Los dos seréis felices, aunque sea por separado.

 

Hugo esboza una forzada sonrisa, aunque duda de las palabras de su amiga.

 

APARTAMENTO DE LUCAS / SALÓN / NOCHE

 

Óscar está sentado en la mesa, que ya está puesta. Parece serio. Lucas no tarda en aparecer por allí, con una enorme sonrisa y dos platos de pasta en sus manos. Pone uno frente a su novio y, con el novio, se sienta frente a él.

 

Lucas: Siento que la comida sea tan sosa, pero es lo único que tenía. Mañana tengo que bajar a hacer la compra.

 

Óscar esboza una forzada sonrisa.

 

Óscar: No te preocupes.

 

Los dos se quedan unos segundos en silencio.

 

Lucas: ¿Has hablado con Hugo?

 

Óscar: (Extrañado) No, ¿por qué?

 

Lucas: Desde que nos lo hemos encontrado esta mañana, estás raro.

 

Óscar: Bueno, es que… ha sido un poco incómodo.

 

Lucas: Sí, la verdad es que sí. Pero parece un chico muy agradable.

 

Óscar: Lo es. Como amigo es de los mejores que se pueden tener.

 

Vuelven a guardar silencio durante unos segundos.

 

Lucas: ¿Todavía le quieres?

 

Óscar sigue en silencio durante unos segundos, pensando, hasta que finalmente vuelve a forzar una sonrisa.

 

Óscar: Claro que no. Lo sabes perfectamente, si todavía le quisiera a él, no estaría contigo. Es solo que… me ha sorprendido que se lo tomara tan bien, eso es todo.

 

Lucas: (Suspira) Ya.

 

Los dos empiezan a comer en silencio, aunque Lucas no parece haberse quedado demasiado conforme con la respuesta de su novio.

 

PLAYA DE GIJÓN / NOCHE

 

Andrea pasea por la playa, pensativa. Mira el mar, y la luna. De pronto, se da cuenta de que hay una chica sentada en la orilla, dejando que el agua moje sus pies descalzos. Es María, la chica con la que Carlos ha intentado ligar esa misma mañana en el “Four”. Tras dudar durante unos segundos, Andrea esboza una amplia sonrisa y se acerca a ella.

 

Andrea: Hace buena noche, ¿verdad?

 

La chica le mira y esboza una forzada sonrisa.

 

María: Sí, la verdad es que sí.

 

Andrea se sienta a su lado.

 

Andrea: ¿Eres nueva en la ciudad?

 

María: Estoy de vacaciones.

 

Andrea: ¿Y te está gustando?

 

María: Mucho.

 

Andrea: Yo llevo cinco años viviendo aquí, y no lo cambio por nada.

 

María: No me extraña.

 

Las dos jóvenes guardan silencio durante unos segundos.

 

María: Tú eres la que estabas esta mañana con el chico ese en la cafetería, ¿verdad?

 

Andrea: Sí. Es mi ex novio.

 

María: (Sorprendida) ¿Y os lleváis bien?

 

Andrea: Tenemos nuestras rachas.

 

Ambas se ríen, divertidas.

 

Andrea: Oye… ¿te apetece venir a mi casa y nos tomamos una copa?

 

María: (Atónita) ¿Lo dices en serio?

 

Andrea: Bueno, yo…

 

María se levanta, indignada, sin dejar que termine la frase.

 

María: No me lo puedo creer. ¡Estáis enfermos! ¡Totalmente enfermos!

 

La joven se aleja de allí, enfadada, ante la sorprendida mirada de Andrea.

 

HOSPITAL GENERAL / CONSULTA DEL DOCTOR MARTÍNEZ / MAÑANA

 

Claudia, sentada en una de las sillas, espera nerviosa, cuando el doctor Martínez aparece por allí, con una carpeta entre sus manos.

 

Doctor Martínez: Buenos días.

 

Claudia: Hola. ¿Tiene ya los resultados?

 

Doctor Martínez: Sí.

 

El hombre se sienta y, tras abrir su carpeta, lee los informes que hay dentro, en silencio. Claudia le observa, nerviosa.

 

Claudia: ¿Y bien?

 

El médico cierra la carpeta y la mira, sin saber muy bien qué palabras usar. La joven se da cuenta.

 

Claudia: Tenía razón, ¿verdad?

 

Doctor Martínez: Eso me temo.

 

Claudia: No puedo tener hijos…

 

Doctor Martínez: Lo siento.

 

A Claudia se le llenan los ojos de lágrimas. No es capaz de decir nada más.

 

CASA DE HUGO, ISRA Y ANDREA / COCINA / MAÑANA

 

Hugo, todavía en pijama, está tomándose un café sentado en la encimera, con la mirada perdida en algún punto de la sala, cuando el timbre le hace salir de sus pensamientos. El joven, extrañado, se levanta y camina hacia la puerta. Se sorprende todavía más al ver a Óscar al otro lado.

 

Hugo: ¡Óscar! ¿Qué haces aquí?

 

Óscar: Yo… quería hablar un segundo contigo.

 

Hugo: La verdad es que me pillas un poco liado.

 

Óscar le mira de arriba abajo, extrañado.

 

Óscar: Estás en pijama.

 

Hugo: Eh… sí… por eso mismo. Todavía me tengo que duchar y eso. Quiero ir a la facultad, voy a seguir con la carrera.

 

Óscar: (Asustado) ¿Te vuelves a Madrid?

 

Hugo: ¡No! No, para nada… la haré a distancia.

 

Óscar: Oh, eso… eso está bien.

 

Hugo: Sí…

 

Un incómodo silencio surge entre los dos jóvenes.

 

Óscar: Yo… solo quería asegurarme de que todo está bien con el tema de Lucas. Ayer en la playa…

 

Hugo: (Interrumpiéndole) Fue un poco raro, sí, lo sé… pero es normal. Me alegro de que seas feliz, es solo que… necesito tiempo.

 

Óscar esboza una forzada sonrisa.

 

Óscar: Ya. Entiendo.

 

Vuelven a quedarse en silencio.

 

Óscar: ¿Entonces está todo bien?

 

Hugo: Perfectamente. De verdad.

 

Óscar: Bien, pues entonces… me voy. Buena suerte con lo de la carrera.

 

Hugo: Gracias.

 

Óscar: Hasta luego.

 

Hugo: Chao.

 

Óscar se aleja de allí y Hugo cierra la puerta para después apoyarse en ella, con los ojos llenos de lágrimas.

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / MAÑANA

 

Jaime está tras la barra del local, atendiendo a dos mujeres, cuando entra Claudia y, esbozando una forzada sonrisa, también se coloca tras la barra. Su marido, cuando termina de atender y servir, se acerca a ella y le da un beso.

 

Jaime: Buenos días.

 

Claudia: Hola.

 

Jaime: ¿Cómo ha ido? ¿Qué tal han salido las últimas pruebas?

 

Claudia guarda silencio durante unos segundos, sin saber qué hacer. Finalmente opta por seguir esbozando su forzada sonrisa.

 

Claudia: Bien, ha ido bien. Todo está perfecto.

 

Jaime: ¿Segura? No pareces demasiado convencida.

 

Claudia: Sí…

 

Jaime la observa, preocupado. La joven se pone nerviosa, aunque intenta disimularlo.

 

Claudia: Aprovechando que hay poca gente, voy al almacén para ver si hay que hacer algún pedido. Ahora vengo.

 

La chica se aleja de allí, intentando que su marido no se dé cuenta de que sus ojos se han llenado de lágrimas.

 

PARQUE “RUISEÑORES” / MAÑANA

 

Carlos: ¡No me jodas!

 

Andrea: Te lo juro.

 

Los dos amigos, sentados en uno de los bancos mientras se fuman un cigarro, se ríen animadamente.

 

Carlos: Pero joder, ¿cómo se te ocurre después de ver cómo me rechazó a mí?

 

Andrea: Oh vamos Carlos, admítelo. Yo estoy mucho más buena.

 

Carlos: Para una lesbiana, sí, pero para una hetero…

 

La joven le interrumpe dejando escapar una sonora carcajada, por lo que su ex novio la mira, extrañado.

 

Carlos: ¿Qué pasa? ¿De qué te ríes?

 

Andrea: Esa tía no era hetero. Como mucho bi, créeme.

 

Carlos: ¿Y cómo estás tan segura?

 

Andrea: (Divertida) ¿Nunca has oído lo del radar?

 

Carlos: Pero eso es cosa de homosexuales, y tú no lo eres. Tú eres…

 

Carlos hace una pausa antes de seguir hablando.

 

Carlos: La verdad, no tengo muy claro lo que eres.

 

Andrea: Yo no soy nada. Simplemente disfruto del sexo, sin más pretensiones.

 

Carlos: Mírala, y parecía tonta.

 

Los dos jóvenes vuelven a reírse. Ninguno de ellos se da cuenta de que Lidia, celosa, se ha acercado a ellos.

 

Lidia: Vaya, veo que os lleváis muy bien para haber sido pareja y haber acabado como acabasteis.

 

Ambos la miran, sorprendidos.

 

Andrea: ¡Lidia!

 

Carlos: ¿Qué haces por aquí?

 

Lidia: Oh, nada en especial. Tengo que hacer unos recados. ¿Y vosotros?

 

Carlos: Bueno, nosotros…

 

Andrea: (Interrumpiéndole) Teníamos que arreglar algunas cosas y bueno, nos hemos puesto a recordar viejos tiempos, y… ya sabes.

 

Lidia: (Molesta) Sí. Ya sé.

 

Un tenso silencio surge entre los tres.

 

Lidia: ¿Te apetece quedar luego, Andrea? Si no estás muy ocupada recordando viejos tiempos, claro.

 

Andrea: (Sonríe) ¡Claro! ¿Te llamo luego y concretamos hora?

 

Lidia: Perfecto. Hasta luego.

 

Carlos: Chao.

 

Lidia se aleja de allí, ante la nerviosa mirada de los dos jóvenes.

 

Carlos: No deberíamos quedar en público la próxima vez.

 

Andrea: No…

 

Los dos jóvenes permanecen en silencio unos segundos.

 

Andrea: Parece que al final no estábamos tan buenos.

 

Carlos: (Extrañado) ¿Perdona?

 

Andrea: Mira.

 

Carlos mira hacia dónde le señala su ex novia. Ven a María cogida de la mano de un chico y de otra chica. Los tres charlan animadamente, entre risas.

 

Carlos: Vamos, no me jodas…

 

Los dos amigos se ríen, divertidos.

 

BAR “FOUR” / INTERIOR / TARDE

 

Óscar está sentado en uno de los sofás, tomándose un botellín de cerveza él solo, pensativo, cuando Marta entra en el local y, al verle, se acerca a él esbozando una sonrisa.

 

Marta: Buenas tardes.

 

El joven fuerza otra sonrisa.

 

Óscar: Hola.

 

Marta: ¿Puedo sentarme?

 

Óscar: Claro.

 

Marta se sienta junto a su amigo, y los dos se quedan unos segundos en silencio.

 

Marta: ¿Qué te pasa?

 

Óscar: (Extrañado) Nada, ¿por qué?

 

Marta: Eres demasiado transparente como para poder engañarme.

 

Óscar: (Suspira) Ya.

 

Marta: Vamos, cuéntame.

 

Óscar vuelve a guardar silencio durante unos segundos.

 

Óscar: Es Hugo. Se ha enterado de mi relación con Lucas, y parece que se lo ha tomado… demasiado bien.

 

Marta: (Extrañada) ¿Y cuál es el problema?

 

El joven piensa durante unos segundos.

 

Óscar: No sé, supongo que… no esperaba que se lo tomara así.

 

Marta: ¿Aún le quieres?

 

Óscar: ¿Por qué todo el mundo me pregunta eso últimamente? ¡Claro que no!

 

Marta: Pues ya está. Has rehecho tu vida, eres feliz, y él lo entiende. Es lo mejor que podía pasar, ¿no?

 

Óscar vuelve a pensar durante unos segundos en silencio, hasta que finalmente vuelve a forzar una sonrisa.

 

Óscar: Sí… supongo que sí.

 

APARTAMENTO DE LIDIA / DORMITORIO DE LIDIA / NOCHE

 

Lidia y Andrea están tumbadas sobre la cama de la primera, completamente desnudas. Andrea se fuma un cigarrillo. Su amante está muy seria.

 

Andrea: Ha sido fantástico.

 

Lidia: Sí.

 

Andrea: Oye, ¿te pasa algo?

 

Lidia: Pues ahora que lo dices, sí.

 

La chica se reincorpora en la cama, apoyando su codo en el colchón.

 

Lidia: No quiero que vuelvas a ver a Carlos.

 

Andrea: (Sorprendida) ¿Disculpa?

 

Lidia: Me has oído perfectamente, Andrea. No me gusta que os veáis, no me gusta que os llevéis tan bien.

 

Andrea: Pero…

 

Lidia se levanta, sin permitir que la chica siga hablando.

 

Lidia: Ya he dicho lo que tenía que decir. O lo tomas, o lo dejas.

 

La joven sale del dormitorio, dejando a Andrea sola, muy sorprendida.

 

 

CONTINUARÁ…