MANERAS DE VIVIR

Es por la tarde. En la calle no para de llover, pero Carlos y Lorena se encuentran en la habitación del joven, tumbados en la cama y desnudos.

LORENA: ¿Sabes, cielo? (Carlos escucha a la joven atentamente) Han sido las mejores Navidades de mi vida…

CARLOS: (Dándole un beso en la frente) Las mías también… aunque he de reconocer que tengo algo de miedo. ¿Quién nos asegura que esta vez vaya a salir bien esto, Lorena?

LORENA: No te preocupes por eso ahora, Carlos. Nosotros nos queremos, y eso es la base de toda relación. Creo que nuestro principal fallo ha sido que siempre hemos pensado en el futuro, y nunca nos hemos detenido en el presente.

CARLOS: (Seco) Bueno, entre otras cosas…

LORENA: (Molesta) Carlos, si empezamos a echarnos cosas en cara, no avanzamos nunca.

CARLOS: (Arrepentido) Vale, si, perdona, tienes razón… lo siento.

Lorena se limita a sonreír al joven, y ambos empiezan a besarse apasionadamente. En ese momento, la puerta del dormitorio se abre, entrando Laura muy contenta, hasta que se encuentra con semejante escena, por la cual exclama un grito, lo que hace que la joven pareja se sobresalte.

CARLOS: (Sin saber que hacer) ¡Laura! ¿Qué… qué estás haciendo aquí? ¿No volvías mañana?

LAURA: (Sin poder creerse lo que ve) Oh… oh, Dios mío.

Laura sale del dormitorio corriendo, dirigiéndose hacia la puerta, y Carlos la sigue, en calzoncillos.

CARLOS: Laura, espera… puedo explicártelo.

LAURA: (Conteniendo las lágrimas) Déjame, por favor… sabía que pasaría esto.

La joven llega a la puerta, donde Carlos le da alcance.

CARLOS: Por favor, escúchame…

Laura niega con la cabeza, y, llorando, sale del piso. Carlos se apoya en la puerta, suspirando, y sin saber como reaccionar.

Hugo está tumbado en su cama, hablando con Marta por teléfono, la cual está de la misma manera que el joven, pero en su dormitorio.

HUGO: Bueno, ¿y qué tal por el pueblo? ¿Lo pasaste bien?

MARTA: Sí, la verdad es que sí… me ha venido bien, necesitaba cambiar de aires.

HUGO: Sí, estabas bastante pocha…

MARTA: (Riendo) ¿Y tú que tal la nochevieja?

HUGO: Rara… paso algo que…

MARTA: (Expectante) Sí, ya sé que algo pasó, ya me lo dijiste… pero ¿el que?

HUGO: Prefiero contártelo mañana en persona… además, estoy cansado, y mis padres están a punto de llegar.

MARTA: (Resignada) Está bien… pero que sepas que esta noche no voy a dormir de la expectación.

Hugo ríe ante el comentario de su amiga.

HUGO: Bueno, te voy a ir dejando… mañana nos vemos, ¿vale? Chao.

MARTA: Hasta mañana…

Hugo cuelga el teléfono, sonriente. Después, se levanta de la cama, y se dirige hacia el corcho que tiene colgado en la pared. Allí observa una foto en la que aparece junto a Edu, de una manera muy acaramelada.

CRÉDITOS: "MY PREROGATIVE" BRITNEY SPEARS
David Gallagher, Maggie Grace, Rupert Grint, Vanessa Hudgens, Jesse McCartney, Jesse Metcalfe, Emma Watson

Capítulo 12
Para olvidar


El lunes amanece lluvioso. La gente se reúne en la puerta del instituto, contentos de volver a verse tras las vacaciones navideñas. Entre la muchedumbre se encuentra Isra, buscando con la mirada a sus amigos, cuando nota una mano en su hombro. Se gira, y ve a Edu, muy serio.

ISRA: ¡Edu! (Abraza a su novio, emocionado, aunque el joven no le corresponde) Joder, no sabes como te he echado de menos…

EDU: Isra… tenemos que hablar.

ISRA: (Preocupado) ¿Qué pasa?

EDU: (Nervioso) Verás, esta… esta Nochevieja pasó algo…

MARTA: (Interrumpiendo a Edu, y abalanzándose hacia los jóvenes) ¡Chicos!

Los tres jóvenes se abrazan y se saludan, contentos, mientras Hugo, que observaba todo desde cierta distancia, y había venido todo el trayecto con Marta, se acerca a ellos.

HUGO: Buenos días…

Edu y Hugo se esquivan las miradas.

ISRA: (Abrazando al recién llegado) ¡Hugo! Que alegría volver a verte…

HUGO: (Extrañado) ¿Y a ti que te pasa?

ISRA: (Sonriente) Bueno… año nuevo, vida nueva, ¿no?

Hugo sonríe al joven de una manera muy forzada, mientras su mirada se cruza con la de Edu por primera vez.

Ya es la hora del recreo, y Laura se encuentra sentada en la repisa del lavabo del baño, mientras Marta se repasa el maquillaje frente al espejo.

LAURA: (Extrañada) ¿Y tú desde cuando te maquillas para venir al instituto?

MARTA: (Como si fuera lógico) Por favor, Laura… acabamos de empezar un año nuevo, y tenemos que madurar un poco. Dentro de unos meses cumpliremos los dieciséis años, y no podemos ser unas crías. Prefiero prepararme ya ahora.

LAURA: (Riendo) Estás de coña, ¿no? (Marta mira a su amiga de muy mala manera, por lo que esta para de reír inmediatamente) Vale, perdona, pero… es que no le veo demasiado sentido a todo esto.

MARTA: ¿Sabes a lo que yo no le veo sentido? (Laura la mira, curiosa) A que estemos aquí, las dos solas, y no me cuentes que coño te pasa.

LAURA: (Fingiendo) ¡Ah!, ¿qué me pasa algo?

MARTA: A mí no me engañas. Llevas toda la mañana callada… y todos sabemos que si tú destacas por algo, es por no saber callarte cuando debes hacerlo. (Laura baja la mirada) ¿Aún no has visto a Carlos? ¿Es eso?

LAURA: No… es precisamente todo lo contrario…

MARTA: ¿Eh? No entiendo nada, Laura.

LAURA: Mira, anoche, cuando llegué del pueblo, fui a darle una sorpresa a su casa. Por supuesto, me costó bronca con mi madre… y total que me arriesgue a ir para encontrármelo en la cama… (Hace una pausa, intentando tomar aire y contener sus lágrimas) con Lorena.

Marta se queda muda, sin saber que decir, por lo que lo único que hace es abrazar a su amiga, la cual empieza a llorar desconsoladamente.

La lluvia ya ha parado, y Edu e Isra están sentados en las escaleras del porche del instituto. Isra intenta besar a Edu por el cuello, pero el chico no para de esquivarle.

EDU: (Molesto) Oye Isra, para… lo que tengo que decirte es bastante importante.

ISRA: No lo será tanto si aún no me lo has dicho…

EDU: (Levantándose rápidamente) ¿Cómo quieres que te lo diga, si eres un agobiante?

ISRA: (Sorprendido por la reacción de su novio) Vale… vale, perdona. Dime.

Edu toma aire, y justo cuando va a contarle a Isra lo que le tiene que contar, aparece por allí Hugo.

HUGO: Chicos, ¿habéis visto a Marta?

EDU: (Enfadado) ¡Joder! ¡Esto es imposible!

Edu se marcha, y Hugo mira a Isra, extrañado.

ISRA: Déjalo… es que lleva toda la mañana intentando decirme algo, y no lo consigue…

HUGO: Vaya, pues siento haberos interrumpido…

ISRA: (Sonríe) No te preocupes… Marta está con Laura en el baño… llevan un buen rato, así que me imagino que estarán al volver ya. Siéntate.

Hugo sonríe de mala gana, y se sienta al lado del joven.

Carlos se encuentra en el quiosco, organizando unas revistas, cuando llega Lorena, muy sonriente, y con una bolsa en sus manos.

LORENA: Hola cariño.

CARLOS: (Girándose, sorprendido) ¡Lorena! ¿No tendrías que estar en la universidad?

LORENA: No empieces… (Le tiende la bolsa) Mira lo que te he traído.

CARLOS: (Cogiéndola, y mirando en su interior) ¿Una camisa? No tendrías que haberte molestado…

LORENA: (Con falsa modestia) Oh, claro que sí. Creo que va mucho con tu personalidad… en cuanto la vi, me acorde de ti. (Carlos mira a la joven, sin entender lo que le está diciendo) Bueno, déjalo. ¿Has hablado ya con Laura?

CARLOS: (Triste) No… no me coge el teléfono.

LORENA: ¿Y por qué no vas a buscarla al instituto?

CARLOS: No creo que sea buena idea, Lorena.

LORENA: Bueno, pero es que debería de saber cuanto antes que estamos juntos… para que no se haga más ilusiones.

CARLOS: Por eso no te preocupes. Con lo que vio anoche, lo de no hacerse más ilusiones será lo más claro que tenga ahora mismo.

Lorena sonríe, y Carlos le da un apasionado beso, al que la chica corresponde gustosamente.

Ya es por la tarde, y Marta y Hugo se encuentran en casa de este último. El chico está tumbado en la cama, mientras ella se encuentra en el suelo, de igual manera.

MARTA: ¿Sabes? Aún estoy esperando que me cuentes esa cosa tan fuerte que te pasó en Nochevieja.

HUGO: (Sonriendo) Tenía la esperanza de que no te acordaras…

MARTA: (Riendo) ¡Qué fe! Anda, va, ¡cuenta!

HUGO: (Suspirando) Es que no se por donde empezar…

MARTA: Bueno… ¿por qué no pruebas a empezar por el principio?

HUGO: (Reincorporándose en la cama) Bien, pues esa noche, después de cenar, yo…

NOCHEVIEJA 2007/2008

Hugo se encuentra en el baño, frente al espejo, peinándose, mientras de la radio de su dormitorio se escuchan los primeros acordes del “My secret people”, de Dover. Cuando el joven termina de peinarse, va hacia su dormitorio. Se detiene un momento frente a la ventana, observando como los copos de nieve caen sobre el suelo, dejándolo todo bajo un manto blanco. Sonríe, risueño, cuando en ese momento llaman al timbre. El joven baja corriendo a abrir, encontrándose frente a frente con Edu.

EDU: (Sonriente) ¿Estás ya?

HUGO: (Devolviéndole la sonrisa) Sí… espera que subo a apagar las luces, quito la música, y nos vamos.

PRESENTE

LAURA: (Interrumpiendo a Edu, que también se lo está contando) Oh sí, sin duda es lo más fuerte que me han contado nunca.

EDU: (Molesto, mientras la joven se ríe) ¿Me quieres dejar seguir? Todavía no he terminado… (Laura se calla de repente, y vuelve a ponerse toda seria, no sin que le cueste algún que otro esfuerzo) Gracias. Pues como te iba contando, el camino hasta el Four fue bastante tranquilo… pero una vez que llegamos allí, empezamos a beber y a beber.

NOCHEVIEJA 2007/2008

Edu, Hugo y Carlos bailan de una manera muy animada al son de “Corazón de fuego”, de Soraya, en el centro del garito, rodeados de gente. Por sus torpes movimientos, dejan vislumbrar que ya han bebido bastante durante la noche. Carlos se pierde durante unos segundos con la mirada, para luego mirar a sus amigos.

CARLOS: Chicos, me tengo que ir ya… ya hablaremos.

Edu y Hugo se miran extrañados, pero continúan bailando, hasta que el primero coge a Hugo del brazo.

EDU: (Arrastrándolo hacia la barra) Vamos a pedir otra copa…

HUGO: No, Edu, no… creo que ya hemos bebido suficiente.

EDU: Venga, la última… (Dirigiéndose a David, que está tras la barra, estresado) ¡David, dos vodkas con lima!

DAVID: Ahora mismo.

El camarero les sirve, y ellos continúan allí hablando.

EDU: ¿Sabes? Al final no me dijiste porque me engañaste sobre como te habías enterado de mi revolcón con Isra.

HUGO: (Sonriendo) Oh, pero eso ya está olvidado, ¿no?

EDU: Bueno, depende de por lo que fuera… Y no, no intentes parecer bueno con esa sonrisa, que a mí no me camelas. (Hugo se ríe) Bueno, ¿me lo vas a decir, o no?

HUGO: (Suspirando) Bueno, si no me dejas otra alternativa… (Respira hondo) fue por esto…

Hugo se acerca lentamente al joven, hasta que le da un tierno beso. Se separan durante unos segundos, para luego besarse apasionadamente.

PRESENTE

MARTA: (Sorprendida) ¿Qué besaste a Edu? ¿Qué te pasa? Tú nunca das el primer paso con un tío.

HUGO: Bueno… supongo que el alcohol influyo en ello.

Laura y Edu, hablando del mismo tema.

LAURA: Sí, tuvo que ser eso… Hugo no es así… entonces, ¿le gustas?

EDU: Pues no lo sé… no hemos hablado desde esa noche. No me devuelve las llamadas…

LAURA: (Curiosa) ¿Pero hubo algo más?

EDU: (Riendo) ¡Tú eres una morbosa! No… no, después del beso salió corriendo.

LAURA: (Preocupada) ¿Y con Isra que vas a hacer?

EDU: Bueno, ya sabes que lo que menos quiero es hacerle daño, así que… creo que es hora de que lo nuestro termine. Llevo todo el día intentándoselo decir, pero no hay manera…

Un nuevo día amanece en la ciudad. Está nublado, aunque no llueve. Hugo y Marta se dirigen hacia el instituto, con paso lento.

MARTA: ¿Vas a hablar con Edu hoy?

HUGO: (Extrañado) ¿Sobre qué?

MARTA: No te hagas el tonto… ya sabes sobre que.

HUGO: ¿Sobre lo de Nochevieja? No… no, no voy a hablar con él. Él está con Isra, y lo nuestro solo fue un beso, nada más. No creo que haya nada de lo que hablar.

MARTA: Pues si no queréis que Isra se entere, dejad de esquivaros… porque si no, empezará a sospechar.

HUGO: (Indignado) Yo no le esquivo…

MARTA: En fin… ¿te apetece venir esta tarde al Four a tomar algo? Esa es una de las cosas que más echaba de menos.

HUGO: Pues ya lo siento, pero tengo cita con Cristina… así que no creo que pueda.

MARTA: (Sonríe) Bueno, no te preocupes… Ya hablare con estos a ver si le apetece a alguno venirse.

Los dos jóvenes continúan su camino hacia el instituto.

Laura está en el recibidor de su casa, poniéndose el abrigo atropelladamente, para después coger la mochila.

LAURA: (Abriendo la puerta) ¡Mamá, marcho ya, que llego tarde! ¡Hasta luego!

Laura sale de su casa, y cruza el jardín rápidamente. Una vez sale de este, se encuentra con Carlos sentado en un banco frente a ella, con la mirada triste.

LAURA: (Borde) Oye, no sé lo que quieres, pero llego tarde al instituto… así que lo siento.

Laura empieza a caminar, pero Carlos la sigue, y la coge del brazo.

CARLOS: No, Laura, tú no te vas de aquí hasta que no escuches lo que tengo que contarte.

LAURA: Lo que tengas que contarme, no me interesa lo más mínimo.

Laura intenta alejarse de allí de nuevo, pero Carlos la sigue agarrando por el brazo.

CARLOS: (Suplicante) Por favor…

LAURA: (Suspira) Se lo más breve que puedas.

CARLOS: (Sonríe de mala gana) Gracias… verás, todo pasó en Nochevieja. Yo estaba con Edu y Hugo…

NOCHEVIEJA 2007/2008

Edu, Hugo y Carlos bailan de una manera muy animada al son de “Corazón de fuego”, de Soraya, en el centro del garito, rodeados de gente. Por sus torpes movimientos, dejan vislumbrar que ya han bebido bastante durante la noche. Mientras baila, Carlos ve como Lorena corre hacia la salida del bar, medio llorando.

CARLOS: Chicos, me tengo que ir ya… ya hablaremos.

Carlos se dirige rápidamente hacia la salida, dejando a Hugo y a Edu solos. Una vez llega fuera, ve que la calle está llena de gente, pero no ve a Lorena. Mira hacia todas las direcciones, hasta que la ve corriendo hacia el final de la calle, y empieza a seguirla.

CARLOS: ¡Lorena! (La chica no se detiene) ¡Lorena, espera!

La chica, sin detenerse, continúa corriendo, pero Carlos consigue darle alcance.

CARLOS: (Con la respiración acelerada) Lorena, detente, por favor… (La joven se para, pero intenta no mirar al chico, cosa que no es suficiente para que este no se de cuenta de que está llorando) ¿Qué pasa?

LORENA: Carlos, déjame, por favor…

CARLOS: No… no puedo dejarte estando así.

LORENA: (Con mirada penetrante) ¿Tanto te preocupo, Carlos? Entonces, ¿por qué no quieres volver conmigo?

CARLOS: (Suspira) Como tú misma dijiste cuando me dejaste, no parábamos de discutir… ¿quién nos asegura que eso vaya a ser diferente ahora, Lorena?

LORENA: ¿Pero tú me sigues queriendo?

CARLOS: (Tras permanecer en silencio durante unos segundos) Sí, Lorena, claro que te sigo queriendo… pero te recuerdo que a ti eso no te compensaba.

LORENA: (Llorando con más fuerza) Joder… ¡Joder! Fui una gilipollas.

Carlos la abraza, entristecido por ver así a su ex.

CARLOS: No, Lorena… no pienses eso… tú hiciste lo que creíste que era adecuado en ese momento.

LORENA: Carlos, bésame…

CARLOS: (Sorprendido) ¿Qué?

LORENA: Por favor…

Carlos, tras permanecer parado durante unos segundos sin saber que hacer, besa apasionadamente a la chica.

PRESENTE

LAURA: (Irónica) Oh, si, claro, y lo de acostaros también fue un pequeño favor que te pidió, ¿no?

CARLOS: No, bueno, después de eso, hablamos, y… pues decidimos darnos una nueva oportunidad.

LAURA: (Molesta) ¿Y tanto te costaba cogerme el móvil, y contármelo?

CARLOS: Quería decírtelo en persona, entiéndelo… aunque tampoco quería que te enterases como lo hiciste.

LAURA: ¿Edu y Hugo lo sabían?

CARLOS: Que va… después de Nochevieja, ninguno de los dos quiso salir, así que no se enteraron de nada.

LAURA: Bien, pues ya te he escuchado… ahora, si me perdonas, llego tarde al instituto.

Laura se va hacia el instituto, a toda prisa, e intentando contener las lágrimas.

CARLOS: ¿Conseguirás perdonarme algún día?

Laura le ignora, y continúa su camino.

Ya es por la tarde, y ha comenzado a chispear. Hugo se encuentra sentado en la consulta de Cristina, y ella está frente a él, observando su historia.

CRISTINA: La verdad es que estoy muy contenta con los avances que has hecho, Hugo. Pensaba darte el alta antes de Navidades, pero al enterarme que las ibas a pasar solo, quise ver como te las apañabas… pero ya veo que lo has hecho muy bien, así que la verdad es que no veo la necesidad de que sigas viniendo, y haciéndole gastar a tus padres un dinero que ya no merece la pena.

HUGO: (Ilusionado) Entonces… ¿ya está? ¿Se acabó?

CRISTINA: Sí… bueno, siempre que tú creas que ya estás recuperado, por supuesto… pero yo, desde el punto profesional, te veo perfectamente.

HUGO: (Sonriente) Sí… sí que lo estoy. Muchas gracias por todo, Cristina.

CRISTINA: (Levantándose) No me las des. Tan solo he hecho mi trabajo.

HUGO: No… has hecho mucho más, te lo aseguro. (El joven también se levanta, y se estrechan la mano) Adiós.

CRISTINA: Adiós… y mucha suerte.

Hugo le sonríe, y sale de la consulta. Cristina se sienta, suspirando, y archiva la ficha del chico.

Ya está anocheciendo. Isra se encuentra en su dormitorio, frente al ordenador, donde suena “Girlfriend”, de Avril Lavigne. En ese momento, alguien llama a la puerta, por lo que el chico quita la música.

ISRA: Adelante.

La puerta se abre, y entra Edu.

EDU: (Tímido) Hola Isra…

ISRA: (Levantándose) ¡Edu! Que sorpresa, no te esperaba… (Da un pico a su novio) ¿Pasa algo?

EDU: Bueno… llevo dos días intentando hablar contigo, pero como no hay manera, pues pensé en venir… así no nos interrumpe nadie.

ISRA: (Ríe) Bueno, mi madre está danzando por ahí.

Edu sonríe de mala gana.

EDU: Verás Isra, yo… me cuesta mucho decirte esto…

ISRA: (Sentándose en la cama, y mirando fijamente al chico) Se acabó, ¿no? (Edu mira al joven, sorprendido) Hay cosas que no hace falta decirlas… pero tenía la esperanza de que te lo pensases mejor.

EDU: Lo siento mucho, Isra, de verdad… pero lo que menos quiero es hacerte daño.

ISRA: Pues llegas un poco tarde… Solo quiero saber una cosa: ¿por qué?

EDU: Mira… creo que… creo que confundí mis sentimientos hacia ti. Por supuesto, siempre has sido una persona muy especial para mí, y lo seguirás siendo… pero confundí la amistad con el amor… y me duele, porque tú eres el más perjudicado…

ISRA: (Sin terminar de creerle) Ya… y no tiene nada que ver una tercera persona, ni nada, ¿no? (Edu mira a su novio, sorprendido, para luego bajar la mirada tímidamente, sin ser capaz de contestarle) Ya… pues si ya me has dicho todo lo que tenías que decirme, márchate, por favor.

EDU: Por favor, Isra, entiéndeme, yo…

ISRA: Edu, entiéndeme tú a mí. Quiero estar solo.

EDU: (Dirigiéndose a la puerta) Muy bien… lo siento.

Edu sale del dormitorio, dejando a Isra solo, el cual rompe a llorar.

CONTINUARÁ...